Robles dice que el viaje de Feijóo a Letonia coincidía con un ejercicio de la OTAN, pero que está siempre invitado

Moncloa argumenta que no hay precedentes de visitas de líderes de la oposición a misiones militares en el exterior

La ministra de Defensa, Margarita Robles, ha justificado este martes que se rechazó una visita del líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, al contingente español desplegado en Letonia porque coincidía con un ejercicio «muy importante» de la OTAN, pero que tiene siempre «las puertas abiertas» para conocer cualquier unidad militar.

«Feijóo sabe que será muy bien recibido en cualquier unidad militar, pero no cuando se estén realizando unas operaciones que puedan distorsionar la visita», ha justificado Robles después de que el PP haya denunciado que el Gobierno impidió a su presidente visitar a los militares españoles desplegados en la frontera con Rusia.

La ministra ha insistido en que todas las unidades militares tienen «la puerta abierta» a todos los ciudadanos porque el Gobierno entiende que las Fuerzas Armadas «no son de un partido político», sino que «son de todos los españoles».

«Lo que no hay que hacer nunca con las Fuerzas Armadas es política partidista», ha reivindicado tras la denuncia del Partido Popular. Por tanto, ha insistido en que Núñez Feijóo «será muy bien recibido» en cualquier unidad militar, pero siempre que eso no interfiera con el desarrollo de unas maniobras.

Según ha asegurado, la intención del líder de los populares de viajar a Letonia la próxima semana coincidía con unas maniobras «muy importantes» de la Alianza Atlántica, dentro de la que se enmarca la misión española en el país.

«Las Fuerzas Armadas son de todos, nos sentimos muy orgullosos y las visitas hay que planificarlas adecuadamente para que no distorsionen las operaciones que se están realizando», ha insistido la ministra.

En este sentido, Robles ha subrayado que la misión de disuasión en Letonia es «muy arriesgada» y «muy complicada», aunque ha reivindicado que el Gobierno tiene una política de defensa «abierta a todos» y «que no es partidista». «A diferencia del PP en la legislatura anterior», ha remarcado.

Fuentes del Palacio de la Moncloa apuntan además que no hay ningún precedente de una visita de un líder de la oposición a una misión internacional de las Fuerzas Armadas, como la que quería hacer Feijóo.

Según subrayan, los viajes a las operaciones militares los protagonizan los miembros del Gobierno o miembros del Congreso o del Senado. «Es enredar por enredar», aducen desde La Moncloa.

A este respecto, la portavoz del Gobierno, Isabel Rodríguez, ha señalado que esta petición del PP va en la línea de toda la legislatura y ha pedido al principal partido de la oposición que deje de poner palos en las ruedas y apoye al Gobierno en su política exterior.

Rodríguez ha hecho esta declaraciones en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros al ser preguntada por este asunto. Así, ha aprovechado para criticar al líder del PP, que lleva un año al frente del partido, después de la salida de su antecesor Pablo Casado.

Para la portavoz, el balance de Feijóo es «bastante decepcinante» y se ha preguntado para qué ha servido este cambio y este año si «seguimos en las mismas, también en política exterior», según ha lamentado. Finalmente ha opinado que si en el PP tuvieran que plantearse ahora el cambio de líder, quizá tomaban «otra decisión».

HECHO «INSÓLITO»

Para el PP, se trata de un hecho «insólito» y ha emplazado al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a revocar esa «equivocada» e «incomprensible» decisión que, según el partido, contaba «con el respaldo de las autoridades competentes de la Alianza Atlántica».

Según ha relatado el partido, el PP planteó al Ministerio de Defensa su voluntad de que Alberto Núñez Feijóo, en su calidad de líder de la oposición, realizase una visita a las tropas españolas desplegadas en Letonia.

Pese al «entendimiento inicial» en el contacto establecido con el Ministerio de Defensa y «contar con el visto bueno de los mandos de la OTAN», el Gobierno decidió finalmente «no autorizar la visita», según los populares .