Rivera avisa a Sánchez de que «el Frankenstein se le ha ido de las manos» y le insta a alejarse de los independentistas
Lo ve «más cómodo con los que escupen» a Borrell que con los que «aplauden y defienden» al ministro, como Ciudadanos
El líder de Ciudadanos, Albert Rivera, ha advertido al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, de que el «Frankenstein» que ha creado al aliarse con Podemos y los partidos independentistas catalanes «se le ha ido de las manos», y le ha pedido que se aleje de ellos y permita que el PSOE «vuelva al constitucionalismo».
En rueda de prensa en el Congreso, Rivera ha declarado que «a Sánchez se le ha ido el Frankenstein de las manos» y «se le está girando en su contra», y por eso este miércoles se vio un «espectáculo lamentable» en el Pleno del Congreso con el momento de tensión entre el ministro de Asuntos Exteriores, Josep Borrell, y diputados de ERC.
«Le pedimos al sanchismo que vuelva al constitucionalismo y que no se equivoque de aliados y de adversarios», ha afirmado, acusando a Sánchez de estar «más cómodo con los que escupen» a su ministro e «insultan a tres millones de votantes» –al llamar «fascistas» a Ciudadanos– que con quienes aplauden y defienden a Borrell, como hizo su grupo parlamentario.
Respecto a si el diputado de ERC Jordi Salvador escupió o no a Borrell al salir del hemiciclo, Rivera ha dicho que él no tiene «el VAR ni el ojo de halcón» para saber qué hizo exactamente, pero cree que los políticos separatistas «escupen cada día, en sentido figurado, a la Constitución española cada vez que dicen que España es una dictadura, llaman fascistas a los demócratas o señalan a los jueces».
SÁNCHEZ DEBERÍA TENER «UN MÍNIMO DE DIGNIDAD»
El presidente de Ciudadanos ha denunciado la «degradación moral del PSOE» para estar «al servicio de Sánchez», al que ha pedido «un mínimo de dignidad». Considera, además, que el jefe del Ejecutivo ha adoptado una posición de «equidistancia» entre «los que han dado un golpe» en Cataluña y «alientan a los comandos separatistas violentos», por un lado, y «los demócratas», por otro.
En su opinión, las fuerzas independentistas se dedican a «acosar a jueces y fiscales y señalar a quien piensa distinto» en Cataluña, y en el Congreso intentan «liquidar la confianza de los españoles en la política y deslegitimar las instituciones». Pero «Sánchez, con la obsesión de mantenerse en la Moncloa, es capaz de permitir que se humille al pueblo español», ha lamentado.
Ante esta situación, ha propuesto aplicar la reforma que propone Cs para exigir al menos un 3% de los votos a nivel nacional para poder tener representación en el Congreso, de manera que los partidos independentistas y nacionalistas que ahora están en la Cámara Baja solo tengan escaños, en su caso, en el Senado. «Ha llegado la hora de que nos defendamos democráticamente de los que quieren liquidar nuestra democracia», ha subrayado.
SÁNCHEZ YA BUSCA APOYOS PARA UNA FUTURA INVESTIDURA
Por otro lado, Rivera ha acusado a Sánchez de «purgar a los que discrepan», por haber cesado al abogado del Estado Edmundo Bal, que defendió acusar por el delito de rebelión, en vez de por sedición, a los líderes del proceso independentista. Esto se suma al hecho de que el Gobierno y el PSOE no quieran descartar la posibilidad de indultar a aquellos que sean condenados por los tribunales, y a sus críticas a la medida de prisión preventiva.
«Sánchez está haciendo todo lo posible para que no estén en la cárcel y para que la sentencia sea menor» y, por si acaso, «les ha prometido un indulto para que haya impunidad», ha concluido, avisando de que el presidente del Gobierno está buscando el apoyo de las formaciones independentistas y nacionalistas «para su futura posible investidura».
Por último, el presidente de Ciudadanos ha señalado que las informaciones que se han conocido sobre las prácticas fiscales de varios miembros del Gobierno muestran que el Ejecutivo socialista «sube los impuestos a los españoles» mientras sus integrantes intentan «pagar menos impuestos».
«Este Gobierno tiene ya tantas manchas como el de Mariano Rajoy», con «la mitad de los ministros tocados y algunos hundidos», así que «lo mejor que puede hacer Sánchez es convocar elecciones», ha afirmado.