Árima gana un 84% menos por mayores gastos, pero incrementa un 18% los ingresos
Árima Real Estate registró un beneficio neto de 2,4 millones de euros en los nueve primeros meses del año, lo que supone un desplome del 84% respecto al mismo periodo del año anterior, lastrado por el incremento de los costes, tanto generales como financieros.
Según informó la socimi a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), el 50% de su cartera todavía se encuentra en remodelación y las plusvalías de este año no con comparables con las del año pasado, lo que también explica el descenso en el beneficio.
La firma que dirige Luis López de Herrera-Oria logró incrementar los ingresos un 18%, hasta los 3,8 millones, tras mantener estable la recaudación de alquileres en el 100%, sin exposición al retail ni al ocio, a pesar de al evolución de la crisis sanitaria.
Por otro lado, el resultado bruto de explotación (Ebitda) fue negativo, de 1,1 millones de euros, frente al resultado positivo de 778 millones del año pasado, en un trimestre «marcado por la incertidumbre y las malas expectativas económicas».
En este sentido, Árima defiende haber optado por la prudencia, al conservar una cartera defensiva, adquirida a precios que considera «muy competitivos y con gran potencial de crecimiento». Se trata de una cartera que ofrece un 155% de incremento potencial en sus rentas, con unas expectativas conservadoras.
Con estos datos y tras cumplirse un año de la última ampliación de capital que llevó a la socimi a triplicar el tamaño con el que se lanzó a cotizar, Árima mantiene una posición de caja de 144 millones de euros, un balance con el que prevé hacer frente «a cualquier imprevisto».
«Es reconfortante que nos mantengamos en una posición de gran solidez con una cartera llena de oportunidades, con bajo apalancamiento y amplia liquidez. A pesar de la incertidumbre a corto plazo, creemos firmemente en las perspectivas a largo plazo de nuestra estrategia y nuestra cartera», asegura su López de Herrera-Oria.
La socimi también ha seguido acometiendo su plan de negocio y proseguido con las obras previstas de remodelación de más de 40.000 metros cuadrados en Madrid, cuyo avance no se ha visto impactado por la crisis del Covid-19.