Ribera tacha de «inaceptables» los insultos de Argelia a Albares, pero insiste en recuperar las relaciones bilaterales

La vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, ha tachado de «inaceptables» las declaraciones de Argelia, por boca de su agencia oficial de prensa APS, en las que ha arremetido contra el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, a quien ha tildado de «pirómano» por dar a entender que Rusia estaría detrás de los últimos pasos de Argel.

Ribera, que ha insistido en la importancia de recuperar las relaciones bilaterales, se ha expresado en estos términos en una entrevista en Telecinco, recogida por Europa Press, al ser preguntada acerca de si va a responder el Gobierno a Argelia por estas declaraciones hacia el titular de Exteriores.

«Es inaceptable que ningún medio de comunicación introduzca y vierta ese tipo de comentarios contra nadie y muchos menos contra un ministro de exteriores del Gobierno de un país vecino con el que ha habido una relación muy intensa durante décadas y con el que tenemos que normalizar la relación cuanto antes», ha trasladado la ministra.

En este sentido, ha argumentado que no se dan las circunstancias como para que haya una «reacción mantenida en el tiempo de estas características» porque los intereses comunes son mucho más «amplios, estables y duraderos» que una tensión que la ministra ha calificado de «puntual».

A renglón seguido, ha defendido que las relaciones se mantienen en lo que representa una «muy buena parte» de los intercambios comerciales entre España y Argelia. «Creemos que es un país confiable y se va a seguir manteniendo y recuperando todo aquello que pueda haberse visto afectado», ha añadido.

Ribera también ha mostrado su confianza en poder recuperar una relación que va mucho más allá del ámbito de la energía y del gas y ha reivindicado que el Gobierno se ha mostrado desde el primer día «abierto a seguir consolidando la relación bilateral» con el país argelino.

En esta clave, ha señalado que es una obligación del Ejecutivo el tener una relación excelente con los vecinos del sur, aunque entre ellos «puedan tener divergencias en política doméstica y en política exterior».

Con todo, ha reafirmado que «no es admisible ni tolerable» las acusaciones de la agencia estatal argelina a Albares, al tiempo que ha aclarado que las relaciones se mantienen «más allá de lo que pueda parecer» y ha atribuido la crisis con Argelia a «episodios puntuales o cuestiones que hayan podido ser malinterpretadas por cualquiera de los dos países».