Ribera defiende que la UE acelera su descarbonización pese a subida «temporal» del consumo de gas y carbón
BRUSELAS, 24
La vicepresidenta tercera del Gobierno y responsable de Transición Ecológica, Teresa Ribera, ha defendido este lunes que la Unión Europea está acelerando su conversión para la descarbonización de su economía a pesar del aumento «temporal» en el consumo de gas y carbón que ha vinculado a razones de seguridad energética tras la ruptura con Rusia por su invasión de Ucrania.
«Es capital que Europa ponga de manifiesto que, si bien necesitamos cierta flexibilidad en el corto plazo, y algunos países están volviendo a incrementar el consumo de carbón y gas, es algo absolutamente temporal por razones de seguridad energética», ha declarado Ribera a la prensa en Luxemburgo, a su llegada a una reunión de ministros de Medio Ambiente de la UE.
En este encuentro, los Veintisiete tienen previsto adoptar un texto que defina la posición común de cara a la XXVII Cumbre del Clima (COP27), que se celebrará el próximo noviembre en Sharm El Sheik (Egipto), pero la discusión llega aún «abierta» a los ministros.
De cara a esta cita internacional, Ribera ha considerado que uno de los mensajes que debe dejar claro la Unión Europea al resto de participantes es que Europa «está acelerando su transformación» para lograr una descarbonización que sitúe al bloque en una posición «mucho más segura, mucho más estable».
El objetivo de esta tendencia hacia la descarbonización de la economía europea, ha dicho, es «ganar la batalla» en el contexto actual, en el que la invasión rusa de Ucrania y la posterior crisis energética ha puesto de manifiesto la «vulnerabilidad» que los países de la UE están afrontando.
Tras la reunión de ministros de Medio Ambiente este lunes, Ribera continuará el martes en Luxemburgo para asistir a un nuevo encuentro de los ministros de Energía de la UE para avanzar en desarrollo técnico de las últimas medidas de intervención del mercado energético propuestas por Bruselas y que la pasada semana recibieron el aval político de los jefes de Estado y de Gobierno de la UE en una cumbre en Bruselas.