Revilla lamenta la dimisión de la gerente de Primaria en «solidaridad» con su subordinada

El presidente cántabro espera que sea sustituida «pronto» por una persona de su misma «valía» y no le constan más ajustes en Sanidad

El presidente regional, Miguel Ángel Revilla, lamenta «mucho» la dimisión de la gerente de Atención Primaria del Servicio Cántabro de Salud (SCS), Alicia Gómez, en un «gesto de solidaridad» con su subordinada Beatriz Josa, la directora médica que renunció al cargo la semana pasada al trascender que su madre, de 87 años, había recibido la vacuna del Covid.

El regionalista ha subrayado la «extraordinaria» capacidad de la gerente y confía en que «pronto» sea sustituida por otra persona de la misma «valía» o «parecida». En este sentido, ha indicado que no le constan más ajustes en la Consejería de Sanidad, algo que, en cualquier caso, es competencia de su titular, el socialista Miguel Rodríguez.

«Pregúntenle a él», ha respondido Revilla este viernes a los periodistas, al ser cuestionado por la marcha de la gerente días después de hacerlo su subordinada, y a los que ha señalado que el consejero no le ha comentado nada acerca de otros posibles cambios en su departamento. Al respecto, se ha referido a la comparecencia de Rodríguez prevista en el Parlamento.

En todo caso, el presidente ha asegurado que Gómez -hija de Ignacio Gómez Llata, que junto a él fundó la asociación ADIC, de la que luego nació el PRC- no ha dimitido por no estar de acuerdo con la línea sanitaria trazada en la región.

Por contra, ha sido un «acto de solidaridad» con Josa, que renunció a su puesto a pesar de que entendió que no había cometido «ninguna ilegalidad» con la vacunación a su madre, con una dosis que sobró cuando se administraban a profesionales sanitarios del servicio de emergencias 061, en el centro de salud Nueva Montaña de Santander.

A propósito de este hecho, el presidente cántabro ha recordado que en toda España existe en la actualidad una «sensibilidad enorme» con el proceso de inmunización frente al Covid, de modo que «nadie debe saltarse las normas», más si se trata de un cargo público.

Así, el proceso «se mira con lupa», ya que no es lo mismo -ha comparado- que se vacune un político que una persona que tiene contacto directo con los enfermos.

Para finalizar, Revilla ha subrayado la «buena gestión» que a su juicio se está realizando en Cantabria respecto a la pandemia, ya que a pesar de las críticas de la oposición «los datos son elocuentes». Dentro de que todas las comunidades autónomas están «mal», ha destacado que la nuestra está «mucho mejor» que las demás, gracias a la planificación hecha, cuando lleguen más vacunas, podrá demostrar su capacidad para «ponerlas todas inmediatamente».