Pymetal acusa a sindicatos de «negarse a negociar» y cita a los empleados a acudir a sus puestos el lunes
Alerta del daño «irreparable» de la huelga a la economía regional, de la «supervivencia» de empresas y del efecto «inmediato» en el paro
La patronal del metal en Cantabria ha acusado a los sindicatos del sector del estancamiento de las negociaciones del convenio colectivo, tras concluir de nuevo sin acuerdo la reunión convocada este sábado, porque los representantes de los trabajadores «se niegan a negociar».
Así lo ha denunciado Pymetal, que ha advertido de las consecuencias de la huelga indefinida -ha cumplido su decimoséptimo día consecutivo-, y ha emplazado a todas las empresas siderometalúrgicas de la región a abrir sus puertas el lunes, y a la totalidad de los empleados a acudir a sus puestos, «evitando más perdidas salariales, que se cifran ya en 1.400 euros por trabajador».
«Esta huelga está dañando de forma irreparable la economía de la región y a la pervivencia de las empresas, y tendrá un efecto inmediato en el empleo de Cantabria, pero las empresas no pueden ceder al chantaje sindical, sencillamente porque no se puede», señala la patronal en un comunicado.
En este sentido, asegura que las pretensiones de los sindicatos se han mantenido «invariables» de cara a la reunión de este sábado y «la negociación se estanca, dado que desde ámbito sindical no existe voluntad de negociar».
«La pretensión sindical excede con mucho la disponibilidad económica del mercado y de las empresas, que Pymetal ya ha superado en sus últimas ofertas, sin que sea posible un incremento más allá del que se encuentra sobre la mesa».
La patronal explica que ha reiterado su oferta de adelantar un porcentaje de la propuesta de incremento para 2024, para paliar los efectos económicos de los trabajadores como consecuencia de la huelga, y permitir «reflotar» las economías familiares.
Pero la propuesta no ha sido admitida por los sindicatos presentes en la negociación, rechazando incluso -lamenta Pymetal- cualquier propuesta de mediación por el Organismo de Resolución Extrajudicial de Conflictos Laborales.
Así, ante la imposibilidad de plantear una posibilidad de acuerdo, el Orecla ha adoptado la decisión de no convocar nuevamente salvo que existan propuestas viables para cerrar el conflicto.