PP y Vox reclaman en el Congreso poner límite a los microcréditos que usan los partidos para sus campañas
El PSOE propone una subcomisión parlamentaria para actualizar las leyes de financiación de partidos
El PP y Vox han pedido en el Congreso regular la figura de los microcréditos que utilizan los partidos para financiar sus actividades, una propuesta que se votará este jueves en la Comisión Mixta (Congreso-Senado) de relaciones con el Tribunal de Cuentas. El PSOE, por su parte, apuesta por crear una subcomisión parlamentaria para estudiar la actualización de las leyes de financiación de partidos.
Fue la presidenta del Tribunal de Cuentas, María José De la Fuente, quien alertó la pasada semana al Parlamento de que la actual legislación presenta una laguna legal y que es necesario regular esta cuestión.
Según explicó, una cosa es el llamado «crowdfunding» (micromecenazgo), del que ya existen «muchos antecedentes» como rifas o fiestas de los partidos para financiarse, y otra los microcréditos que se están generalizando para afrontar las campañas electorales con aportaciones de particulares sin recurrir a entidades bancarias.
Mientras que el crowdfunding esta regulado, los microcréditos son figuras «relativamente nuevas» que no disponen de normativa específica y su uso se beneficia de que existe una laguna legal. No se pueden considerar donaciones, ya que el dinero aportado se devuelve, pero no hay más legislación sobre créditos que la que se aplica a las entidades bancarias, con lo que estos préstamos de particulares quedan en el limbo.
LA NORMATIVA ES INSUFICIENTE
«La normativa es insuficiente para regular la naturaleza específica de los microcréditos y por eso el Tribunal de Cuentas recomienda una norma específica sobre créditos de particulares», avisó la presidenta del Tribunal de Cuentas.
De la Fuente lanzó ya algunas propuestas que debiera contemplar esa regulación. A su juicio, hay que fijar una cuantía máxima del prestamista, obligar a que las aportaciones sean ingresados en cuentas electorales, garantizar que el microcrédito se devuelva antes de un año natural y que se prohíba la condonación de las deudas a particulares, igual que no se permite a los bancos perdonar sus créditos.
A partir de ahí, tanto el PP como Vox han recogido el guante y, en sus propuestas de resolución sobre los informes del Tribunal de Cuentas sobre las elecciones generales y europeas de 2019, a las que ha tenido acceso Europa Press, han reclamado una nueva regulación sobre este asunto.
Así, el PP llama a reformar la LOREG para completar la regulación de las fórmulas de financiación de las campañas electorales, «haciendo mención específica a las nuevas herramientas de financiación basadas en plataformas digitales de financiación colectiva».
Los populares también reclaman que el Tribunal de Cuentas fiscalice de forma efectiva el crowdfunding en sus siguientes informes, verificando de forma «exhaustiva y continuada» el origen de los recursos, las condiciones de formalización, su cumplimiento y si se produce o no el reintegro íntegro de las cantidades.
VOX RECLAMA UNOS MÍNIMOS
Por su parte, Vox plantea que se estudie la conveniencia de regular esta práctica y que, al menos, se fije «una cuantía mínima por prestamista que no exceda del límite máximo previsto en la normativa electoral para las aportaciones privadas, que el dinero se ingrese en las cuentas bancarias electorales, que las cantidades tengan que ser devueltas antes de que pase un año natural de las elecciones y que si el prestamista renuncia a la devolución tenga que hacerlo por escrito y ésta pase a ser considerada una donación.
De su lado, el PSOE ha presentado una propuesta de resolución para que el Congreso cree una subcomisión que analice la conveniencia de reformar la legislación sobre financiación de partidos.
En todo caso, mientras se decide si se hacen o no reformas en este sentido, el Tribunal de Cuentas mantiene su vigilancia control de estos microcréditos y pide a los partidos que ofrezcan los datos que se exigen para los créditos bancarios y para las donaciones en campaña.
Así, en los informes de fiscalización sobre las campañas electorales todo ingreso y pago se debe realizar en cuentas electorales, no en metálico, y deben constar los datos del aportante (nombre y DNI). Y en los informes anuales se comprueba si ese microcrédito fue devuelto con cargo a las subvenciones electorales y si se han cumplido los requisitos establecidos en la póliza.
En su comparecencia de la semana pasada, De la Fuente ya avanzó que en los próximos informes anuales sobre partidos políticos se incluirá un anexo, similar al que ya existe sobre la deuda de las formaciones con los bancos, en el que se harán comparativas de microcréditos y sus condiciones.