PP y PSOE siguen con su cruce de acusaciones en el Congreso pese la fumata blanca para el CGPJ
El PP y el PSOE han vuelto a protagonizar este martes un duro cruce de acusaciones en el Pleno del Congreso pese al acuerdo sellado apenas horas antes entre los dos partidos para renovar el Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), que lleva más de cinco años y medio con el mandato caducado.
Ha sido durante el debate de dos mociones derivadas de las interpelaciones que contestó hace una semana al ministro de Presidencia y Justicia, Félix Bolaños, precisamente el encargado de suscribir con el popular Esteban González Pons, el pacto sobre el órgano de gobierno de los jueces.
El encargado de presentar la moción del PP ha sido el vicepresidente segundo del Congreso, José Antonio Bermúdez de Castro, quien ha recalcado que, en contra de lo defendido por Bolaños, las «amenazas» al Estado de Derecho provienen de los socios parlamentarios del Gobierno e incluso «a veces» del propio Ejecutivo. «Ya está bien de confundir e intentar engañar a la gente. Mírense al espejo», ha apostillado.
ABUSO DE DECRETOS, MINISTROS SIN CONTROL…
Además, ha censurado que el Gobierno haya «normalizado el uso de decretos ley», que PSOE y Sumar mantengan congelados los que se convalidan pero se tienen que tramitar como proyectos de ley o bloqueen las iniciativas de la oposición y del Senado en lo que considera un «acto de deslealtad institucional sin precedentes».
También se ha quejado de que se haya convertido en costumbre que «cinco o seis ministros» comuniquen ausencia a los Plenos de control y ha exigido al Gobierno que los titulares ministeriales «den preferencia a su obligación de control antes de fijar otros compromisos que deberán ser ineludibles».
La réplica se la ha dado la también miembro de la Mesa de la Cámara, la secretaria segunda, Isaura Leal, quien ha rebatido todas las críticas del PP afeándole sus constantes «intentos frustrados de desestabilizar y deslegitimar las instituciones» desde la Presidencia del Congreso hasta la del Gobierno «atacando sin fundamento» a Francina Armengol y Pedro Sánchez. «Recuperen la oposición política constructiva», ha rogado la diputada socialista quien ha dicho añorar la oposición «contundente pero leal» que ejerció el PP en el pasado.
El diputado de ERC Francesc-Marc Álvaro ha aprovechado para reprochar al PP que siga abundado en sus críticas al Gobierno pese a haber pactado con los socialistas la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) y se ha defendido de la denuncia de que Sánchez ha puesto España en manos de los independentistas recordando a los populares que asuma que este es «un sistema parlamentario».
SUMAR: HAY QUE IR MÁS ALLÁ
También se ha referido al pacto sobre el CGPJ la diputada de Compromís, Águeda Micó, quien ha avisado de que no va a «servir para nada» si no se acomete una verdadera reforma del sistema judicial y del sistema democrático que vaya «mucho más allá» con acciones políticas «a favor de la mayoría y en contra del lawfare».
Y también desde Vox, Íñigo Hoces ha sacado a relucir el acuerdo anunciado este martes y lo ha hecho para cargar contra el PP. «Llevan cacareando semanas enteras que no se podía negociar y pactar el CGPJ con ese gobierno, son una verdadera estafa», ha proclamado, acusando a al PP de haber dado «la estacada» y «dinamitado» la separación de poderes.
Desde Junts, Josep María Cruset, ha echado en cara a los dos grandes partidos que vivan «en su burbuja política» enzarzados en «despropósitos» y «debates estériles y completamente improductivos» que, según ha dicho, reafirman a los independentistas en su deseo de dejar de formar parte de España.
GANA LA JUSTICIA Y PIERDEN LOS AUTORITARIOS
Este tono se ha mantenido también durante el debate de la moción presentada por Vox, en la que se instaba al Ejecutivo a cesar su «permanente ataque» a la independencia del Poder Judicial, a promover la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) para que sean los jueces y magistrados los que elijan a los vocales o la reprobación del fiscal general del Estado, Álvaro García Ortíz, por su «intolerable» conducta.
El encargado de defender el texto ha sido el diputado de Vox, Javier Ortega Smith, quien ha resaltado la «casualidad» de que se debata sobre este asunto el mismo día que PP y PSOE han llegado a un acuerdo para el CGPJ. «Hoy han quedado al descubierto las vergüenzas de unos y de otros», ha destacado y ha censurado que el consenso entre populares y socialistas sea para «controlar» políticamente la justicia.
Por su parte, el diputado socialista Ignacio López ha celebrado que hoy sea un «mal día para el sectarismo» y el «matonismo institucional» Vox y se ha dirigido al PP para saber si van seguir «deslegitimando» el Tribunal Constitucional que ellos mismo votaron.
Sin embargo, el diputado popular Fernando de Rosa ha celebrado que el PSOE haya accedido a renovar el CGPJ con las condiciones que había defendido el PP «en todo momento». «Ya era hora de que abandonaran el tic franquista de colonizar instituciones», ha remarcado y ha situado la renovación del CGPJ como la «derrota» de la política ultra. «Hoy pierden los autoritarios y gana la justicia, misión cumplida señorías», ha festejado.
BUEN DÍA PARA EL BIPARTIDISMO
Por su parte, desde los socios habituales del PSOE, el portavoz de ERC, Gabriel Rufián, ha censurado que el PSOE hace dos meses tachase de «fango» al PP y ahora pacten con ellos. Al igual que el portavoz de Podemos, Javier Sánchez Serna, quien considera que hoy «no es un buen día para la democracia», sino para el «bipartidismo».
Finalmente, el diputado de Sumar Gerardo Pisarello ha cargado contra Vox por «soñar con un modelo inquisitorial» de jueces y ha advertido que para que la renovación del CGPJ sirva tiene que «revertir» el «sesgo clasista» de una justicia, que según el es «implacable con las pequeñas sardinas, pero muy condescendiente con los grandes tiburones».