PP se sentará a debatir con Page la reforma de Ley Electoral siempre que el nuevo Estatuto de C-LM blinde agua y sanidad
TOLEDO, 7
La secretaria general del Partido Popular de Castilla-La Mancha, Carolina Agudo, ha apuntado que su formación estaría dispuesta a empezar a debatir la posible reforma de la Ley Electoral siempre y cuando se zanjen antes otros asuntos a la hora de abrir la necesaria reforma del Estatuto de Autonomía, como son blindar aspectos como la sanidad o el agua para la región.
En una entrevista con Europa Press, Agudo ha lamentado que la futura reforma fuera «el primer anuncio» elevado por el presidente electo, Emiliano García-Page, nada más conocerse los resultados electorales.
«Siempre lo hemos tenido claro, y si hay que llegar a un consenso, hay que hacerlo para blindar servicios y políticas sociales», ha dicho Agudo como paso previo a sentarse a negociar una nueva Ley Electoral.
Por tanto, «una vez que se hayan blindado todas las políticas sociales que vengan a resolver problemas, se podrá hablar de la Ley Electoral», ha dicho la número dos del PP castellanomanchego, quien ha recordado que en todo caso el PSOE de García-Page ha tenido oportunidad de impulsar esta reforma desde hace ocho años cuando llegó por primera vez al Gobierno.
LA SANIDAD, PUNTO DE PARTIDA
La principal condición que el PP pondrá al PSOE para empezar hablar será la forma de hacer que la sanidad supere la «quiebra» a la que considera que se ha visto abocada tras la pandemia.
Por ello, plantea garantizar «un buen servicio sanitario» y blindar en la Carta Magna de la región la garantía de «dotación de profesionales sanitarios» para conseguir «una sanidad mejor», a lo que ha sumado como otro aspecto fundamental la recuperación de la carrera profesional sanitaria.
En cuanto a los detalles de por dónde ha de ir la nueva Ley Electoral, ha señalado que es el PSOE quien tiene que hacer la propuesta antes de empezar a hablar.
En esta línea, pide a los socialistas no limitarse a analizar si hace falta que haya más o menos diputados, sino con la premisa de mejorar la «representatividad real» de la región.