Podemos no entra a valorar los libros de texto en Cataluña: «No vamos a usar la escuela como arma arrojadiza»
El secretario de Organización de Podemos, Pablo Echenique, no ha entrado a valorar este lunes el texto de Alta Inspección del Estado de Educación que alerta sobre los libros de texto en Cataluña y ha asegurado que no va a usar como «arma arrojadiza» la escuela catalana, como, a su juicio, hacen otros partidos.
Después de que de la Alta Inspección señalara en un informe remitido al entonces ministro de Educación, Íñigo Méndez de Vigo, del contenido de unos libros de texto en Cataluña que aleccionan a los alumnos, Echenique ha optado por no comentar esta situación, asegurando que no van a participar de la estrategia de «echar gasolina» a la crisis en Cataluña, que a su juicio emplean otros partidos.
Podemos ha defendido lo que considera una posición «responsable» ya que, más allá de estudiar el caso, ha afirmado que no va a usar las fuerzas cuerpos de seguridad, la televisión pública o la escuela catalana «como arma arrojadiza» para «incendiar» el conflicto.
En su lugar, el dirigente morado ha señalado la importancia de «dialogar» con los actores políticos en Cataluña y ha apuntado a la plurinacionalidad como solución a la situación. «Nosotros no vamos a usar la escuela como arma entre partidos para enrarecer y tensionar el conflicto», ha reiterado Echenique.
Este lunes, el diario El Mundo publica de que el trabajo de Alta Inspección alerta de que en Cataluña existen manuales escolares que «contravienen los derechos, libertades y deberes fundamentales recogidos en la Constitución Española y en las leyes orgánicas educativas». Apunta que libros de Primaria de esta comunidad autónoma «incitan al separatismo» e «ignoran la presencia de Cataluña dentro de España», mientras que en la ESO «utilizan todos los elementos del discurso nacionalista soberanista» para «retorcer la historia» de «manera aleccionadora».
Según esta información, este organismo dependiente del Ministerio de Educación entregó el pasado mes de febrero el esperado informe, que han ignorado tanto Méndez de Vigo como la actual titular, Isabel Celaá.