PNV pregunta si la reforma constitucional sobre el aborto del PSOE y Sumar es «postureo» y una «burla» a las mujeres
Cree que este procedimiento «debilitaría el derecho de las mujeres» y dice que los correcto sería incluirlo como derecho fundamental
BILBAO, 16
El presidente del EBB del PNV, Aitor Esteban, cree que el acuerdo entre el PSOE y Sumar sobre el anteproyecto de reforma del artículo 43 de la Constitución para blindar el aborto debilitaría «el derecho de las mujeres», y se ha preguntado, por tanto, si es «postureo» o una «burla» a las propias mujeres.
En entrevista concedida a Euskadi Irratia, Esteban se ha mostrado crítico con el procedimiento que plantean los dos socios del Gobierno del Estado, y cree que lo correcto sería incluir el aborto como derecho fundamental, lo que, según ha precisado, requeriría la disolución de las Cortes Generales y convocatoria de elecciones.
El líder jeltzale comparte, de esta forma, la opinión de juristas que han advertido de que el planteamiento del PSOE y de Sumar rebajaría la protección sobre el derecho a la interrupción voluntaria del embarazo de las mujeres, al suponer su reconocimiento en un nuevo apartado del artículo 43 de la Constitución, es decir, entre los principios rectores y no entre los derechos fundamentales que recoge el título I de la Carta Magna.
EL «POSTUREO»
«Si lo hicieran bien, eso supondría que, al día siguiente de esa votación, habría que convocar elecciones. Entonces, ¿esto qué es?, ¿puro postureo?, ¿burlarse de las mujeres?. Además, sabiendo que no tienes mayoría. Lo que nos dicen es que demos nuestro voto favorable para debilitar el derecho de las mujeres», ha añadido Aitor Esteban.
En todo caso, el presidente del EBB no ha especificado si los jeltzales votarían a favor o en contra, ya que se está en un momento incipiente en el que el Consejo de Ministros acaba de aprobar el pasado martes iniciar los trámites para blindar el derecho al aborto en la Constitución mediante la inclusión de un cuarto apartado en el artículo 43.
En una comparecencia posterior, la ministra de Igualdad, Ana Redondo, admitió que la reforma no es «sencilla», y afirmó que su pretensión es «evitar retrocesos» ante la «ola reaccionaria» que pretende retrotraer a las mujeres a «situaciones pasadas».
