Piden seis años y medio al líder de una banda dedicada a la venta fraudulenta de muebles por medio millón
El fiscal ha solicitado una pena de seis años y medio de cárcel al cabecilla de una banda dedicada a la venta fraudulenta de muebles en tiendas de oulet de Cantabria por cerca de medio millón de euros, así como una multa de 4.860 euros.
Además, el ministerio público reclama a otros cuatro procesados por esta causa tres años de encarcelamiento y el pago de 3.240 euros, así como también en concepto de responsabilidad civil que indemnicen en 461.864 euros al propietario de la empresa por el beneficio económico obtenido por cada uno de ellos.
El juicio se celebrará a mediados de noviembre en la Audiencia Provincial y según el escrito de la Fiscalía, al que ha tenido acceso Ep, el principal implicado llevaba 23 años trabajando en la sociedad, ubicada en un polígono de Guarnizo y dedicada a la distribución de muebles y enseres destinados al descanso, sirviendo en exclusiva marcas comerciales de productos que se adquieren a proveedores y venden a comercios.
A pesar de que su categoría profesional era la de mozo de almacén, debido al largo período de prestación de servicios gozaba de la «total confianza» del gerente de la empresa y, por ello, estaba autorizado a operar en el sistema informático, gestionando la entrega de pedidos, albaranes de recepción, documentos para stocajes, pedidos de venta, albaranes de remisión y facturas, y a negociar directamente con ciertos clientes, llegando incluso a realizar cobros en metálico que después se contabilizaban como ingresos en caja.
Aprovechando esta circunstancia, desde fecha desconocida empezó a disponer de productos «en su propio beneficio», alterando los registros de entregas y ventas de forma que no fueran detectadas las irregularidades.
Para ello, hacía pedidos no autorizados «alterando» las etiquetas de los productos solicitados, o bien eliminaba los albaranes de entrega del proveedor, y en otros casos «fingía» devoluciones de muebles que imputaba a otros ejercicios contables, consiguiendo «enmascarar así la distracción de efectos de la empresa».
Una vez obtenida la posibilidad de disposición en su favor de los productos, se concertó con otro acusado al que conocía por haber sido titular de una tienda oulet hasta enero de 2020, para que los adquiriera directamente a precios «muy bajos» o bien los distribuyera a otros mayoristas, también con precios «por debajo» del mercado y de esta forma «obtener todos ellos pingües beneficios a costa de los bienes detraídos de la empresa de muebles».
El resto de procesados, tres propietarios de sendos comercios de oulet y stock, realizaron negocios con el líder de la trama, «teniendo perfecto conocimiento de la ilícita procedencia de las mercancías».
Tras un «minucioso» análisis pericial contable de los ejercicios 2016 a 2020, se determinó en 461.864 euros el montante económico de las mercaderías sustraídas, según el escrito provisional del fiscal, que considera los hechos constitutivos de un delito continuado de apropiación indebida en concurso con otro igualmente continuado de falsedad de documento mercantil, y cuatro más, también continuados, de receptación.
Por los dos primeros ilícitos solicita, respectivamente, al cabecilla cuatro años y dos años y medio de cárcel, esto es, un total de seis años y medio, y por el tercer tipo de ilícito reclama tres años. Por este último delito el fiscal ha interesado el sobreseimiento provisional de la causa contra otros sospechosos, por no haber resultado debidamente acreditada la participación de los mismos en los hechos delictivos.