Petro propone pagar a los campesinos para desincentivar el cultivo de coca en Colombia
El presidente de Colombia, Gustavo Petro, ha propuesto a los campesinos crear un fondo nacional con el objetivo de revitalizar la selva amazónica, como alternativa al cultivo de coca.
«Estamos dispuestos a crear un fondo abierto a la nación y al mundo, financiado por el presupuesto nacional, y no por los cuatro años de Gobierno», ha propuesto el dirigente en declaraciones recogidas por la radiotelevisión pública colombiana (RTVC).
«Queremos aprobar a través de procedimientos legales unas vigencias futuras durante 20 años, tiempo en el que creemos la selva se puede regenerar, con unas cuantías del presupuesto nacional mínimas», ha explicado Petro.
Con este proyecto, el Gobierno de Petro calcula que la administración pagaría a los campesinos entre dos y tres millones de pesos mensuales con el fin de dejar de cultivar hoja de coca en el país.
El mandatario colombiano ha incidido en la idea de «cuidar la selva». «Sustituyamos la coca por la selva», ha reiterado antes de invitar a los grupos armadas a «participar también en este esfuerzo –una vez estén desarmados– de construir colectivamente».
La Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC) indicó este viernes que el cultivo de coca en Colombia alcanzó niveles históricos en 2021, después de que el área sembrada incrementase un 43 por ciento en un año.
La superficie de cultivo de coca ha pasado de 143.000 hectáreas en 2020 a 204.000 hectáreas en 2021, aumentando un 43 por ciento. Esta cifra rompe la tendencia de reducción de los tres últimos años, pero en el balance general consolida el incremento que se produce desde 2014.
La concentración y permanencia de los cultivos tienen la explicación en la ubicación en las que se encuentran: doce de los catorce enclaves se localizan en departamentos fronterizos o con salida directa al mar.
Colombia es uno de los mayores productores mundiales de cocaína, por delante de Perú y Bolivia. Ni el tratado de paz con las FARC ni la pandemia del COVID-19 han frenado el cultivo de coca a gran escala en el país. Una gran parte de la cocaína se introduce de contrabando en Estados Unidos. En los últimos tiempos también se han producido incautaciones récord en Europa.