Petro defiende a su hijo de las acusaciones de Bukele: «En Colombia el presidente no destituye jueces»
El presidente colombiano, Gustavo Petro, ha defendido a su hijo mayor, Nicolás, de las acusaciones lanzadas por su homólogo salvadoreño, Nayib Bukele, quien en un nuevo episodio de sus cuitas a través de Twitter le ha recordado los asuntos de su primogénito con la justicia. «En Colombia hay presunción de inocencia, el presidente no destituye jueces», ha respondido.
Después de que Bukele le preguntara qué tal marchaban las cosas por casa y se preguntara si no era su hijo Nicolás Petro «el que hace pactos bajo la mesa y además por dinero», el presidente colombiano le ha recordado que en su país se «profundiza» en la democracia no se «destruye».
«Estimado presidente Nayib todo bien en mi casa. Aquí existe la presunción de inocencia, principio universal. Aquí el presidente no destituye ni jueces, ni magistrados; lucha por una justicia más autónoma y fuerte», ha escrito en Twitter.
El nuevo rifirrafe entre ambos presidentes comenzó después de que Petro se hiciera eco de una noticia sobre las sospechas de la Fiscalía de Estados Unidos sobre el pacto secreto al que habrían llegado Bukele y las pandillas salvadoreñas para reducir la tasa de homicidios a cambio de mejores condiciones en las cárceles.
«Mejor que hacer pactos del gobierno por debajo de la mesa es que la justicia pueda hacerlos encima de la mesa sin engaños y en búsqueda de la paz», escribió Petro en su perfil de Twitter, respondiendo así a las críticas hacia su plan de dialogar con grupos armados para poner fin al conflicto armado colombiano.
Bukele respondió asegurando no entender la «obsesión» por El Salvador del presidente Petro, a quien le preguntó si no es su hijo mayor, Nicolás, el que hacía esos pactos bajo la mesa y por dinero, en referencia a los supuestos sobornos que habría recibido a cambio de beneficiar a delincuentes en los planes de paz que adelanta el Gobierno y por lo que ya hay una investigación abierta.
El encontronazo verbal entre ambos presidentes comenzó hace unas semanas cuando Petro calificó de «campos de concentración» algunas de las cárceles salvadoreñas, después de que Bukele difundiera un vídeo con el espectacular traslado de miles pandilleros a una prisión de máxima seguridad recién construida.
Aquel centro, inaugurado a finales de febrero, fue construido en el municipio de Tecoluca para encerrar a unos 40.000 de los más de 64.000 pandilleros detenidos bajo el régimen de excepción que impera en El Salvador desde marzo de 2022.
Petro calificó aquellas imágenes de «terribles», que «la dan a uno escalofríos», y si bien dijo que no debía «meterse en otros países», criticó que haya «gente a la que le guste ver a la juventud en las cárceles, creyendo que eso es la seguridad» y en pos de lograr que «se disparen las popularidades».
«El presidente de El Salvador se siente orgulloso porque redujo la tasa de homicidios a partir, dice él, de un sometimiento de las bandas que hoy andan en las cárceles, en mi opinión, dantescas», añadió Petro, quien comparó esas políticas de «cárceles» con las de «universidades» de Colombia a lo largo de los años.