Perdonar, ser agradecido y tener fe: estas son las enseñanzas de Alejandro González en 'Ten fe, todo llega'
/COMUNICAE/
El escritor reflexiona en su novela sobre cómo afrontar las dificultades y da algunas pautas y consejos para conseguir vivir bien y alcanzar el éxito
Cuando dos duras adversidades se interponen en la vida de Fernando, un reconocido abogado, este debe aplicar todo lo que ha aprendido desde que era joven para lograr sobrellevarlas. Con esta premisa comienza la primera novela del autor Alejandro González, Ten fe, todo llega (Barker & Jules Books).
El escritor narra, mediante una inteligente sensibilidad, la vida de Fernando desde que tenía trece años hasta que consigue ser un abogado de renombre, y discurre sobre todas las lecciones que ha ido aprendiendo a lo largo de ese tiempo gracias a su familia, su novia Andrea, sus amigos y profesores y el deporte, y que le han servido para afrontar las difíciles situaciones familiares y económicas en las que se ve envuelto en distintas etapas de su vida.
«Unir nuestras fuerzas, nuestros corazones, nuestros dolores, nuestra felicidad, nuestros conocimientos y nuestra fe son la mezcla perfecta para salir victoriosos y con aprendizaje ante cualquier adversidad. Recuerda que, pase lo que pase, jamás se pierde, solo se gana y se aprende».
Alejandro González visibiliza así valores complejos pero necesarios, como la aceptación de uno mismo, la empatía, la disciplina, la justicia, la lealtad, la perseverancia, el respeto, el amor o la felicidad, entre otros. Valores que el lector canalizará también, pues a medida que Fernando vaya creciendo, el lector lo hará con él y lo acompañará en cada una de las ocasiones donde aprenda estas virtudes.
Con un propósito de enseñanza y de superación, y en cuyas palabras se esconden pequeños tintes autobiográficos, Alejandro González presenta así una novela de autoayuda en la que reflexiona sobre la importancia que se debe dar a la vida y cómo se han de enfrentar los reveses de la misma que aparecen durante el trayecto.
«La fe en uno mismo y la fe en nuestro creador (para quienes son creyentes) es tan solo lo que nos da el impulso para iniciar la pelea contra una adversidad; después de ello, viene el trabajo duro, la voluntad para vencer nuestros miedos y temores, la acción para encontrar la estrategia y el método para salir de momentos duros y de sufrimiento. Como te mencioné antes, para cumplir tus metas y objetivos tendrás que aplicar hábitos como la disciplina, la perseverancia, la voluntad, la paciencia y la gratitud».
Una novela realista en la que la soltura del escritor acompaña una trama bien elaborada, tierna e inspiradora que transmite lecciones de vida, tan estimadas como indispensables, para poder vencer los obstáculos y alcanzar los objetivos y el éxito a los que se quiera llegar: perdonar a aquellos que hieren, estar agradecidos por todo lo que se tiene y tener fe en uno mismo y en Dios.
Los lectores empatizarán con los personajes y sus vivencias y extrapolarán el aprendizaje que el protagonista recorre a lo largo de toda la novela a su propia vida, obteniendo de esta manera la capacidad de enfrentarse a los miedos y a las dificultades que se encuentren en su camino.
«La vida es dura, es cierto, pero es hermosa. Hay cosas que suceden y que no están al alcance y control tuyo (la muerte de un ser querido, una pérdida económica atribuible a un tercero, una crisis emocional), pero lo que sí puedes controlar es tu actitud y tu forma de pensar, recuerda que tus pensamientos te construyen o te destruyen».
Ten fe, todo llega es, pues, una proposición noble, optimista y entrañable que permanecerá en el corazón y en la mente de todo aquel que la lea.
La novela de Alejandro González ya está disponible en las librerías para todos los lectores que busquen una historia que les ayude a aprender de los problemas que puedan presentarse en la vida y a crecer como personas.
Fuente Comunicae