Pedro Sánchez defiende que tiene un proyecto político «para años» y pide a PP y Cs que permitan el trámite de los PGE
CHICLANA DE LA FRONTERA (CÁDIZ), 18 (EUROPA PRESS, Lourdes Pino)
El presidente del Gobierno y secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha defendido este domingo, ante los que le reclaman adelanto electoral, que el PSOE tiene un proyecto político «para años» para España y no para meses, al tiempo que ha pedido este domingo a PP y Ciudadanos (Cs) que permitan el trámite de los Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2019 en el Congreso de los Diputados y los aprueben.
Pedro Sánchez ha participado este domingo por primera vez en la campaña de las elecciones andaluzas del 2 de diciembre, con su intervención, junto a la presidenta de la Junta y candidata a la reelección, Susana Díaz, en un mitin en las Bodegas Vélez de la localidad gaditana de Chiclana de la Frontera, al que han asistido más de 1.500 personas.
Ha aprovechado para demandar a ambos partidos el apoyo a los PGE y a una subida del Salario Mínimo Interprofesional (SMI) a los 900 euros a partir del próximo año.
«Que lo apoyen, porque un país rico no puede tener trabajadores pobres», ha indicado al presidente, quien ha querido dejar claro, en cualquier caso, que, aunque no se cuente con el apoyo de esos partidos, el Gobierno va a sacar adelante un aumento importante del SMI.
Tras indicar que la moción de censura supuso un cambio de época en España y la llegada de «aire limpio», ha querido dejar claro que el proyecto político socialdemócrata que tiene el PSOE para este país es «para años» y no para unos meses, y ha recalcado que, ante todo, quieren que se gane una «década» para la gente joven.
Durante su intervención, el presidente ha considerado que hay que abrir el debate de cómo financiar el estado del bienestar, y ha advertido de que cuando el presidente del PP, Pablo Casado, pide suprimir impuestos como el de actos jurídicos documentados, el de las hipotecas, que está en manos de las comunidades, lo que está planteando la derecha en realidad es «recortar el estado del bienestar» que está en manos de las comunidades.
Asimismo, ha abogado por una reflexión en conjunto sobre la falta de confianza de los ciudadanos en las instituciones, y ha indicado que su Gobierno, con sólo 84 diputados, planteará una reforma constitucional para acabar con los aforamientos en este país.