Ortuzar ve al electorado «preocupado» e «indeciso» y apela a «darle seguridades y certezas»
Destaca que PNV propone «un nuevo contrato social», con reformas e «ideas innovadoras», basadas en el «realismo imprescindible»
BILBAO, 11
El presidente del PNV, Andoni Ortuzar, ve «lógico» que una parte del electorado esté «preocupado e indeciso» y apela a «darle seguridades y certezas». En este sentido, destaca que su formación propone «un nuevo contrato social con la gente de este país para un nuevo tiempo y una nueva andadura nacional» con reformas e «ideas innovadoras», basadas en el «realismo imprescindible».
En un artículo publicado en los diarios del Grupo Noticias, el presidente del PNV alude a lo que denomina como el espíritu de Landako , en referencia al acto celebrado en el recinto de Durango el pasado 27 de enero tras la proclamación de los candidatos para los comicios vascos y europeos, que ve «comparable a aquel espíritu del Arriaga que a finales de los años ochenta reubicó al partido tras la escisión».
Así, destaca que en Landako se «afianzaron» las bases que «nos van a llevar a 2050», con una nueva generación que se incorpora «a la primera línea» junto con las que «vienen de antes» y a las que aún «queda trabajo por delante». «No se trata tanto de sustituir como de complementar y renovar estructuras e ideas», plantea.
Tras asegurar que los jeltzales salieron «contentos» y «esperanzados» de ese acto, reconoce que «no había sido fácil» llegar hasta ese momento porque «los procesos de cambio siempre son complejos», sobre todo en organizaciones como el PNV, «apegadas quizá excesivamente a la costumbre», y destaca que, tras que el «largo» proceso electoral, la propuesta de la Ejecutiva jeltzale «recibió un apoyo unánime».
LAS ENCUESTAS
En relación a las encuestas que se han conocido después, precisa que los sondeos «son apenas la foto de un momento muy concreto» y en este caso ni siquiera han sido convocados los comicios autonómicos. En todo caso, ve al electorado «tan preocupado como esperanzado, incluso predomina un poco más la preocupación», ante las elecciones.
Además, destaca de las encuestas que el PNV es «el partido que más y mejor valoran las y los indecisos», tanto aquellos que dudan entre dos partidos como quienes dudan si ir a votar o no.
Para Ortuzar, «preocupación e indecisión parecen ser características de este tiempo postpandémico y de entreguerras», en el que los ciudadanos «valoran bien su situación económica y los servicios públicos», pero «temen nubarrones en el horizonte que cambien las cosas».
«Y eso nos hace ser más sensibles y exigentes con las reivindicaciones personales y menos permeables a lo colectivo, a la comunidad. En el plano electoral, propicia alineamientos muy cortos en el tiempo y cambiantes según la coyuntura y la percepción individual justo antes de ir a votar, lejos de la fidelidad de antaño a los partidos», indica.
Por ello, ve «lógico» que una parte del electorado del PNV esté «preocupado e indeciso» y apela a que «toca ahora darle seguridades y certezas».
En este sentido, subraya que en el acto de Landako su formación ofreció «un nuevo contrato social con la gente de este país para un nuevo tiempo y una nueva andadura nacional».
«Con reformas, con mejoras, con ideas innovadoras, con distintas maneras de hacer. Eso sí, todas ellas basadas en algo imprescindible en política: el realismo. Una realidad contrastada y contrastable por la trayectoria de un partido que ha demostrado que sabe liderar y gestionar un país, aun en tiempos muy complicados. Y que ahora propone retomar un camino hacia el bienestar, el progreso y la justicia social. Un camino seguro, fiable y ancho en el que quepamos todos y todas, y en el que sea posible encontrarnos con otros pueblos y naciones», señala.
Para Ortuzar es «la misma realidad que nos obliga a reempoderarnos otra vez como partido para salir a la calle a decir a los cuatro vientos que aquí está de nuevo el PNV, con un proyecto de futuro y con nuevas personas, con ganas de darlo todo por Euskadi». «Es la hora de la militancia, de la movilización general», concluye.