Orbán acusa a los líderes europeos de dejarse llevar por la «fiebre de la guerra» en Ucrania
El primer ministro de Hungría, Viktor Orbán, ha considerado un éxito el resultado de la reunión extraordinaria de jefes de Estado y de Gobierno de la UE, de la que salió un compromiso de ayuda hacia Ucrania valorado en 50.000 millones de euros, aunque ha cuestionado que otros líderes sigan dejándose llevar por la «fiebre de la guerra» en lugar de apostar por buscar un alto el fuego.
«No lo estamos haciendo bien en este sentido, porque Bruselas está entregado a la fiebre de la guerra», ha afirmado Orbán, en una entrevista radiofónica en la que ha reprochado el envío de armas y ha llamado a trabajar para lograr «cuanto antes» un alto el fuego, como paso previo a conversaciones de paz entre Kiev y Moscú.
«La paz llegará cuando haya cambios en Bruselas», ha sentenciado, con la vista puesta ya en las elecciones de junio, cuando se renovará el Parlamento Europeo y, por extensión, se reconfigurarán los contrapesos políticos en las principales instituciones.
Orbán ha prometido que Hungría seguirá sin enviar armas y ha explicado que la ayuda aprobada el jueves únicamente tiene como objetivo prevenir el colapso económico de Ucrania, según declaraciones difundidas por su Gobierno.
Asimismo, ha reiterado que estos 50.000 millones de euros, que Budapest amenazó con bloquear y parten del presupuesto común, no implicarán un potencial «desvío» de los fondos europeos que le corresponden a Hungría y que permanecen bloqueados.
ENCUENTRO CON AGRICULTORES
El primer ministro húngaro se desplazó el miércoles por la noche, poco después de aterrizar en Bruselas, a la concentración de agricultores que reclamaban mejoras del sector. Según Orbán, la producción es cada vez más cara por la regulación europea, que favorecería también importaciones baratas.
De hecho, se ha mostrado partidario de bloquear los productos ucranianos, algo que le habrían pedido los propios manifestantes. «Me pidieron que bloquease (la frontera). Los polacos, los eslovacos y los húngaros deberíamos frenar las mercancías ucranianas en las fronteras de Europa y no dejarlas pasar», ha agregado.