Orange intentará disipar las dudas de Bruselas sobre su fusión con MásMóvil y evitar así los remedies
El consejero delegado de Orange España, Ludovic Pech, ha asegurado que este mismo jueves se reunirán con la Comisión Europea para abordar cuáles serán los siguientes pasos en el proceso de evaluación de la fusión de la operadora con MásMóvil en España, un encuentro en el que las dos empresas intentarán disipar las dudas que mantiene Bruselas sobre el impacto de la operación en el mercado minorista y también para intentar evitar la imposición de condiciones ( remedies ).
En ese sentido, la evaluación que lleva a cabo la Comisión Europea desde el pasado abril se centra en dos elementos fundamentales, el mercado mayorista, que tiene que ver con que un operador ofrezca sus redes a otros, y el minorista.
Esta misma semana, la Comisión Europea confirmó que ve problemas de competencia en la fusión anunciada entre Orange y MásMóvil porque teme que se reduzca el número de operadores de redes en los mercados minoristas españoles de servicios de telecomunicaciones móviles e internet y ello redunde en «grandes subidas de precios» para los clientes finales.
En ese sentido, tanto Orange y MásMóvil han valorado positivamente que la Comisión Europea haya retirado sus consideraciones sobre el impacto que esta operación podría tener en el mercado mayorista, si bien el otro apartado principal que está siendo evaluado todavía puede suponer la imposición de remedies , es decir, que las empresas se tengan que desprender de algunos activos para poder seguir adelante con la operación.
Preguntado al respecto, el consejero delegado de Orange, que ha participado en la primera jornada de la sexta edición del DigitalES Summit que se celebra en Madrid, ha señalado que las compañías están en «constante diálogo» con la Comisión Europea.
En ese sentido, el directivo ha explicado que una vez que la Comisión Europea plantea sus observaciones sobre la operación, son las empresas las que deben proponer una serie de remedies que puedan satisfacer las expectativas de Bruselas, si bien el objetivo de Orange y de MásMóvil es que no se impongan condiciones o que estas sean mínimas.
De hecho, varias empresas del sector están a la expectativa de las posibles condiciones que se apliquen a esta fusión con la intención de poder adquirir determinados activos.
FAIR SHARE
En su intervención en el DigitalES Summit, Pech también ha defendido la aplicación en la Unión Europea (UE) del denominado fair share (contribución justa), una medida que solicitan las principales operadoras de telecomunicación y que defiende que las grandes tecnológicas, como Netflix, Amazon o Meta (propietaria de Facebook, Instagram y WhatsApp), paguen por el uso de la red para financiar las inversiones que serán necesarias en los próximos años debido al aumento del tráfico de datos que se espera.
En ese sentido, ha recordado que la Comisión Europea cifra en 174.000 millones de euros la inversión en redes que será necesaria para lograr los objetivos de conectividad de la UE para 2030, un elemento en el que también ha incidido en su intervención en el mismo evento el presidente de Telefónica en España, Emilio Gayo.
Así, ha opinado que las empresas del sector en Europa están en «una encrucijada» debido a la caída de sus ingresos en los últimos años y a la necesidad de invertir para lograr sus objetivos. Además, ha incidido en que las compañías de telecomunicaciones de la UE están en una situación de «infraescala» para acometer estas inversiones.
Según ha valorado Pech, Europa precisa formentar un marco que «sea favorable» o «aceptable» para mantener la inversión en el sector de la telecomunicación.
Además, ha indicado que las empresas del sector han invertido alrededor de 600.000 millones de euros en la última década en la UE, al tiempo que ha recalcado que Orange ha invertido unos 35.000 millones de euros en los últimos 25 años en España para «construir las redes de súper banda ancha».
En este contexto, la aplicación del fair share no es del agrado de las grandes tecnológicas, que consideran que la implementación de esta medida podría encarecer sus servicios y, además, creen que atentaría contra la neutralidad de internet.