Ópticos-optometristas debaten en OPTOM 2022 sobre el alarmante aumento de la miopía infantil y juvenil
/COMUNICAE/
Los tratamientos actuales no «eliminan dioptrías» de miopía, sino que todos ellos actúan ralentizando su progresión, lo que resulta esencial para estos pacientes
Durante la segunda jornada del 27 Congreso de Optometría, Contactología y Óptica Oftálmica – OPTOM 2022, ha tenido lugar la sesión plenaria titulada Gestión clínica de la miopía infantil y juvenil; una de las más importantes pandemias de nuestra época y un tema de los más debatidos en el colectivo sanitario y, sobre todo, en el colectivo óptico-optométrico.
La salud visual de los más jóvenes se ha visto afectada en los últimos años por los cambios sociales y tecnológicos que se están produciendo. Según los ponentes participantes de esta sesión plenaria del congreso, los nativos digitales, nacidos entre 2002 y el 2021, son ya la generación con la mayor tasa de miopes en comparación con generaciones anteriores, de tal manera que mas del 50% de la población es o será miope. La miopía infantil tiene una prevalencia actual del 30 al 40%, y se estima que llegará al 60% en los próximos años, con los riesgos para la salud visual que supone cuando la miopía alcanza determinados valores.
Hay que tener en cuenta que los nuevos hábitos de estudio y trabajo, durante los cuales se ha incrementado significativamente las horas que pasamos utilizando la visión próxima en detrimento de la visión lejana, además del tiempo que pasamos en el confinamiento por la Covid-19, con un mayor trabajo en visión de cerca (utilización de ordenadores, tablets, videojuegos, smarthphones, etcétera) ha producido que la miopía, y en concreto la miopía infantil y juvenil, se haya convertido en una pandemia imparable.
Para los expertos, en los últimos años han aumentado considerablemente las opciones posibles que el óptico optometrista y/o el oftalmólogo tiene para tratar de ralentizar la evolución de la miopía. “Hoy en día se dispone de fármacos (como la atropina), así como lentes oftálmicas y lentes de contacto (ortoqueratología nocturna y blandas multifocales) para tales fines, pero esa mayor disponibilidad de opciones también produce, en muchas ocasiones, más incertidumbre en lo que se refiere a qué solución elegir y en qué momento”, explica César Villa Collar, doctor en Óptica, Optometría y Visión por la Universidad Complutense de Madrid y coordinador de esta mesa de debate.
Los ópticos-optometristas y otros expertos que participaron en la sesión afirmaron que existe una prevención eficaz para la aparición de miopía. Que un niño padezca miopía dependerá en gran medida de su herencia genética; si tiene un padre miope, tendrá cierto riesgo de ser miope y, si ambos padres son miopes, tendrá aún más riesgo. También influye el grado de miopía de los padres, y los padres que tienen miopía magna o alta miopía (miopes de más de 6 dioptrías) tendrán más riesgo de tener hijos miopes.
“Es fundamental prevenir la miopía en niños y adolescentes; los miopes, cuando superan los 50 años, tienen problemas visuales que en algunos casos llevan a la ceguera. Este riesgo es proporcional al número de dioptrías que desarrollaron de niños. Además, el riesgo de padecer glaucoma es tres veces superior, pero el de perder visión central por la degeneración de las estructuras de la retina, en un miope de tres dioptrías, es el doble de lo normal, pero en un miope de 10 dioptrías este parámetro se multiplica por 200”, comentó César Villa.
En esta sesión plenaria, los especialistas también dieron a conocer, a los más de 1.200 congresistas, las técnicas de manejo de la evolución de la miopía y cómo y cuándo recomendarlas en el niño y/o adolescente. “Es importante tener en cuenta que los tratamientos actuales no “quitan dioptrías” de miopía sino que actúan ralentizando su progresión. Ya que no podemos “quitar dioptrías” de miopía, pero sí frenar su progresión, es fundamental iniciar precozmente estos tratamientos, de los que hemos hablado en profundidad en esta sesión plenaria, ya que su eficacia será mayor cuanto antes se inicie el tratamiento”, destacó el experto.
Finalmente, a través de casos clínicos, se comunicó cómo actuar en distintos casos de personas niños y jóvenes miopes.
Fuente Comunicae