ONU y ONG piden 710 millones de dólares para evitar la hambruna en Somalia por la sequía
Las organizaciones humanitarias llaman a aumentar la ayuda al país «antes de que sea demasiado tarde»
La ONU y las agencias humanitarias que trabajan en Somalia han hecho este lunes un llamamiento solicitando 710 millones de dólares con los que ofrecer ayuda crítica a 4,5 millones de personas afectadas por la grave sequía que atraviesa el país y evitar así una vez más que los somalíes se enfrentan a la hambruna.
Las escasas lluvias durante el periodo que va de abril a junio, conocido como Gu, por segunda estación consecutiva se suman a los efectos de la prolongada sequía de 2016 y 2017, de los que el país aún se está recuperando. De hecho, según la ONU, con la estación del Gu de 2018, las lluvias caídas cada estación han estado por debajo de la media.
Como consecuencia de ello, se espera que hasta 2,2 millones de personas estén en situación de crisis y emergencia alimentaria para julio a menos que se incremente la asistencia, lo cual supone un 40 por ciento más que en enero pasado.
«La situación de sequía en Somalia se ha deteriorado rápidamente e intensificado mucho más pronto de lo que se ha visto en la última década», ha resumido el coordinador humanitario en funciones de la ONU en Somalia, George Conway.
«Somalia se encuentra en un momento crítico y con recursos suficientes podemos reactivar las estructuras que evitaron con éxito la hambruna en 2017», ha subrayado. Según la ONU, la desnutrición, las enfermedades relacionadas con la sequía y el desplazamiento van en aumento.
Conway ha advertido de que es «crítico que todos, incluidos donantes, el sector privado, los somalíes en el país y la diáspora, se unan detrás de esta respuesta colectiva y los esfuerzos de prevención», al tiempo que se trabaja con las autoridades somalíes en «forjar resiliencia y abordar las causas subyacentes» a esta situación.
Las organizaciones humanitarias han advertido de que la sequía podría revertir los logros realizados en 2018, de ahí su petición para que se incremente de forma rápida la respuesta para evitar una gran crisis humanitaria al tiempo que se acompañan los esfuerzos de desarrollo del país.
De los 1.080 millones de dólares solicitados para 2019 para la respuesta a las necesidades humanitarias en Somalia, un país afectado por la violencia del grupo yihadista Al Shabaab, vinculado a Al Qaeda, y en menor medida de Estado Islámico, solo se han recibido hasta el momento el 20 por ciento de los fondos.
«Tenemos una oportunidad de evitar una catástrofe en Somalia antes de que ocurra, pero esa ventana se cerrará pronto», ha advertido el director del Consejo Noruego para los Refugiados (NRC) en el país, Victor Moses.
«La crisis por la sequía es muy probable que empeore antes de mejorar, y miles de vida están en juego», ha subrayado, llamando a la comunidad internacional y los donantes a incrementar la asistencia «antes de que sea demasiado tarde».