OCU detecta un ahorro de hasta el 30% en combustible en las gasolineras de las principales rutas vacacionales
La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha detectado «grandes diferencias» de precio en la gasolina y el diésel en las principales rutas de vacaciones, con un ahorro en combustible que puede hasta superar el 30% dependiendo de las estaciones de servicio.
En concreto, la organización ha realizado un estudio de precios comparando las tarifas de gasolina y diésel de las distintas estaciones de servicio que pueden encontrarse a lo largo de 13 grandes rutas que recorrerán los conductores este verano.
Estas rutas corresponden a las seis radiales (A1, A2, A3, A4, A5, A6), la del Mediterráneo (A7), la del Cantábrico (A8), la de las rías gallegas (AP9), la de la plata (A66), la del valle del Ebro (AP68), la Mudéjar (A23) y la de los franceses (A62).
La OCU ha detectado diferencias de precios significativas, especialmente en la A1, A2, A3, A7 y A8, «donde el ahorro posible supera el 30%».
Así, los precios más baratos encontrados directamente en la ruta o a no más de un kilómetro de la salidas los ofrecen las estaciones de servicio independientes, las de las cooperativas, las de supermercados como Alcampo, E.Leclerc o Bonarea y las de pequeñas cadenas como AN Energéticos o Petroprix.
Mientras, los precios más elevados han sido los de grandes cadenas como Repsol, BP y Cepsa, destaca en su estudio la asociación de consumidores.
UNDÉCIMA SUBIDA CONSECUTIVA EN EL PRECIO DE LOS CARBURANTES.
El precio de los carburantes ha encadenado esta semana su undécima subida consecutiva y acumula un encarecimiento de hasta el 8,6% desde los mínimos que tocó a principios de mayo, en plena pandemia del coronavirus.
En concreto, el precio medio del litro de gasóleo ha subido esta semana un 0,37% con respecto a la semana anterior, hasta situarse en los 1,060 euros, según datos del Boletín Petrolero de la UE consultados por Europa Press.
En el caso del litro de gasolina, esta semana se ha encarecido también un 0,34%, enlazando así una nueva subida, para escalar a un precio medio de 1,164 euros.
Desde que se rompió en mayo la tendencia bajista que llevaban los carburantes, los precios del litro de gasolina han recuperado un 8,6% desde los mínimos que tocaron, mientras que los del gasóleo suben un 8,2%.
No obstante, a pesar de este cambio de tendencia al alza en los precios de los carburantes, el diésel es todavía un 12,6% más barato que en las mismas fechas del año pasado, mientras que la gasolina registra un precio un 12,4% inferior.
En concreto, en la misma semana del año pasado, el precio del litro de gasóleo era de 1,213 euros, mientras que el de gasolina se situaba en los 1,329 euros.