MSF pide reforzar «urgentemente» los mecanismos para garantizar la seguridad de los migrantes en Libia

La ONG Médicos sin Fronteras (MSF) ha pedido reforzar «urgentemente» los mecanismos para garantizar la seguridad de los migrantes en Libia y abrir rutas de salida alternativas para proteger a los más vulnerables en el marco de las rutas por el mar Mediterráneo.

«Es prácticamente imposible para estas personas obtener protección física y legal y, como resultado, la mortal ruta migratoria a través del mar Mediterráneo es a menudo su única salida», ha indicado la responsable de Operaciones de MSF en Libia, Claudia Lodesani, agregando que los migrantes son víctimas de «detenciones arbitrarias, tortura y violencia», incluida de tipo sexual.

Así, ha señalado que los países «seguros» de la Unión Europea, que «han estado financiando a la guardia costera libia durante años y fomentando el retorno forzado», deben facilitar la evacuación de las personas migrantes y garantizar su seguridad «en su propio suelo».

En un nuevo informe llamado Salir de Libia , la organización ha explicado la debilidad existente de los mecanismos de protección existentes para las personas atrapadas en el país del norte de África, así como la lentitud de los procesos que pone en marcha la Organización Internacional para las Migraciones (OIM).

MSF ha denunciado en repetidas ocasiones la falta de protección de los migrantes, fuera y dentro de los centros de detención, especialmente en lo que se refiere a servicios médicos, ya que hay migrantes con condiciones sanitarias severas, tanto físicas como mentales.

De hecho, el acceso a estos servicios es casi inexistente fuera de Trípoli y los centros de detención, y el número de plazas en los países de destino es muy limitado. Según las cifras facilitadas por ACNUR, solo 1.662 personas –de un total de 40.000– pudieron abandonar Libia a través de los mecanismos de reasentamiento por parte de la organización en 2021.

Asimismo, tal y como ha recalcado en un comunicado, cerca de 3.000 personas más lo hicieron a través del programa de retorno voluntario de la OIM. En total, se calcula que hay unas 600.000 personas migrantes en Libia.

MSF ha puesto el ejemplo de Italia, donde se ha abierto un corredor humanitario para evacuar a migrantes en situación de vulnerabilidad, mientras que Francia también está manteniendo conversaciones para atender a supervivientes de tortura y violencia.

«La atención médica a personas detenidas de forma arbitraria e indefinida, o que corren el riesgo de sufrir violencia de manera sistemática, plantea muchos dilemas», ha afirmado el responsable de Incidencia de MSF, Jerome Tubiana, quien ha zanjado resaltando que hay que sacar «urgentemente» a estas personas del sistema de detención y del país.