Más de 8.000 familias afganas han huido del repunte de los combates entre Ejército y talibán
Más de 8.000 familias afganas han escapado del repunte de los combates entre los talibán y las fuerzas de seguridad afganas en cinco provincias del país, escenario desde hace cinco semanas de un rebrote de los enfrentamientos interrumpido únicamente por la frágil tregua de tres días declarada la semana pasada con motivo del final del Ramadán.
Se trata de un total de 8.500 familias que han escapado de las provincias de Baghlan, Helmand, Kunduz, Kandahar y Laghman, según ha informado el director de la dirección de refugiados y repatriaciones en Baghlan, Sharifulá Shafiq.
Las familias se enfrentan a la falta de vivienda, acceso a servicios de salud, educación y otras infraestructuras para hacer vida normal, de acuerdo con representantes de los afectados en declaraciones a la cadena afgana Tolo News.
Tres localidades de Baghlan han sido escenario de combates particularmente intensos en los últimos días, entre ellas Burka, que ahora está prácticamente en manos de los talibán.
Asimismo, fuentes de seguridad han informado que al menos 10 miembros de las fuerzas de seguridad y 40 talibán murieron o resultaron heridos en los enfrentamientos del viernes por la noche en Baghlan e Markazi y Nahrin.
«La lucha se ha intensificado en otras localidades como Imam Sahib. Unas 5.000 familias han sido desplazadas. Sus hogares se han convertido en bases militares», ha declarado Mohammad Yusuf Ayubi, jefe del Consejo Provincial de Kunduz.
«La situación es bastante tensa. No tenemos nada para comer. No tenemos nada», ha declarado Gul Mohamad, miembro de una familia desplazada en Laghman. «No tenemos refugio. Tenemos una vida miserable», añade Nur Mohamad, parte de otra familia desplazada en la misma provincia.