Más de 507.000 contratos temporales se convirtieron e indefinidos este año, un 28,3% menos, según Randstad
Un total de 507.382 contratos temporales han pasado a ser indefinidos en lo que va de año, un 28,3% menos que en el mismo periodo del año pasado, cuando se firmaron un total de 707.172 conversiones, según se desprende de un estudio realizado por Randstad.
No obstante, ha puesto de relieve que, pese al notable descenso, el volumen de este año es similar al registrado en 2016, cuando el número de contratos de este tipo ascendió a 479.401 firmas.
Randstad también señala que el 38,9% de los contratos indefinidos que se han firmado en lo que va de año procede de uno temporal y que esta cifra «es la más alta desde 2011, cuando fue de 41,5%».
Asimismo, ha resaltado que este dato lleva seis años de crecimiento ininterrumpido. «A pesar de la caída general de la contratación por culpa de la crisis económica, la tendencia del trabajo temporal como pasarela al indefinido continúa consolidándose», según Randstad.
El director de Randstad Research, Valentín Bote, ha apuntado que tanto el número total de contratos indefinidos como aquellos que proceden de una conversión han estado creciendo de forman ininterrumpida desde 2014, pero esa tendencia se ha visto interrumpida por la irrupción de la pandemia y la consecuente crisis económica.
«Pero lo que no ha descendido, sino que mantiene su senda de crecimiento es la tasa de conversión, por lo que esperamos que, en cuanto se recupere el empleo, continúe aumentando el volumen de conversiones», ha resaltado.
También cree que es «un buen dato» que, en algunas comunidades, cerca de la mitad de los contratos indefinidos siga proviniendo de uno de duración determinada, lo que refleja que «el trabajo temporal es una puerta de entrada hacia el empleo estable», según Bote.
Por meses, el mes de octubre de 2019 registró el mayor número de conversiones del periodo estudiado, «momento desde el cual comenzó a registrar una tendencia negativa, exceptuando los meses de la campaña de Navidad».
Asimismo, el estudio apunta que los meses de abril y mayo de este año, «los más duros de la crisis en materia de empleo», registraron las peores cifras de conversiones, rondando los 26.000 contratos.
Sin embargo, desde los meses más duros de la crisis provocada por la pandemia, se ha experimentado un crecimiento acompasado de la conversión en indefinidos, con la excepción del mes de agosto. La cifra de contratos convertidos temporales convertidos a indefinidos en octubre de este año (56.690 firmas) es un 120,8% superior a la registrada en abril, que fue de 25.677 contratos.
Por sectores, más de la mitad de los contratos indefinidos, según Randstad, se han firmado en el sector industrial, seguido de la construcción (44,8%) y de servicios (37,6%). De su lado, el sector de la agricultura es el que menos peso de conversión tiene, con un 18,8%.
Teniendo en cuenta las comunidades autónomas, Cantabria (48,3%), Galicia y Extremadura (47,2%) y Aragón (47,1%) son las regiones donde más conversiones de temporales a fijos se realizan.