Morant: No debemos permitir que la extrema derecha intente sacar rédito del terrible ataque de Algeciras
Considera que «nuestra democracia es fuerte en su diversidad y no permitirá que la violencia rompa la convivencia»
La ministra de Ciencia e Innovación, Diana Morant, ha expresado su «condena absoluta» por el «terrible» y «brutal ataque» de ayer por parte de un ciudadano marroquí a varias iglesias en Algeciras (Cádiz),que asesinó con un machete al sacristán de una de ellas y dejó varios heridos, y ha opinado que «no se debe permitir que desde la extrema derecha se intente sacar rédito» de lo sucedido.
«Nuestra democracia es fuerte en su diversidad y no permitirá que la violencia rompa la convivencia democrática», ha afirmado la ministra después de que varios representantes de Vox hayan señalado a la «inmigración ilegal» y al avance del islamismo en España tras el ataque de Algeciras.
Morant ha comenzado su intervención en el Foro Ser Cantabria condenando el ataque y expresando sus condolencias y solidaridad con las víctimas y sus familiares (además del sacristán fallecido resultó herido un cura de una iglesia cercana y otras personas).
La ministra se ha mostrado convencida de que en un Estado democrático «todo acto de violencia es injustificado y deber ser rechazado y combatido de manera clara y enérgica». «Mi condena absoluta al ataque de ayer, a la violencia y a la barbarie», ha insistido.
Los ataques a estas iglesias se produjeron ayer por la tarde cuando un hombre de nacionalidad marroquí de 25 años irrumpió en ellas, asesinando en una al sacristán. Además, dejaron varios heridos, entre ellos el sacerdote de otra iglesia cercana.
Tras los ataques, el supuesto atacante fue detenido y, según ha dado a conocer hoy el Ministerio de Interior, se ha sabido que tenía abierto un expediente de expulsión por vivir en España en situación irregular, aunque no constan antecedentes penales ni por delitos de terrorismo, ni en España ni otros países aliados.
Fuentes de la lucha antiterrorista y policiales han explicado que el detenido residía en Algeciras en lo que se conoce como un piso patera , ya que convivía con muchos otros ciudadanos en la misma vivienda.