Montero llama a combatir la cultura «del terror sexual» tras los gritos de acoso contra mujeres en un colegio mayor
Asegura que este episodio demuestra la necesidad de desplegar educación sexual para niños y adolescventes
La ministra de Igualdad, Irene Montero, ha afirmado que las imágenes difundidas en redes de alumnos del Colegio Mayor Elías Ahuja amedrentando a las residentes de otro centro femenino cercano demuestra la necesidad de impartir educación sexual a niños y adolescentes, además de combatir la cultura de la «violación y el terror sexual» que sitúa a las mujeres como «objetos sexuales».
«Es la muestra más evidente de que hace falta educación sexual y que desde las instituciones dejemos de legitimar discursos machistas que niegan la violencia y la igualdad de las mujeres», ha enfatizado en declaraciones a los medios en los pasillos del Congreso.
La difusión de estas imágenes donde muchos alumnos del colegio mayor profieren gritos como «ninfómanas», «putas» y «os vamos a follar» a otras jóvenes ha motivado la repulsa de Montero, que defiende el despliegue de educación sexual a todos los niños, niñas y jóvenes para reforzar la «cultura del consentimiento». »
«Para que todos los niños, todas las niñas y todos los adolescentes aprendan que tratan bien está bien y que tratar mal, está mal; que aprendan sobre la cultura del consentimiento y no sigamos reforzando la cultura de la violación y el terror sexual», ha zanjado la titular de Igualdad.
GRITOS «MISÓGINOS» QUE «ATERRORIZAN A LAS MUJERES»
La secretaria de Estado para la Agenda 2030, Lilith Verstrynge, ha censurado estos «gritos misóginos» que son «violencia» que persigue «aterrorizar a las mujeres».
«Justificarles es normalizar un discurso de odio intolerable. Por eso necesitamos educación sexual que acabe con la cultura de la violación e instituciones comprometidas», ha sentenciado en Twitter.
Su homóloga en Igualdad, Ángela Rodríguez Pam , también sostiene que «quizás la educación sexual» hubiera advertido a estos jóvenes de que su comportamiento es una «amenaza» que «parte de ese terror sexual que coloca las mujeres como objetos sexuales».