Montero dice que el retraso del paquete de ayudas se debe a cuestiones «técnicas» y niega «tensiones»
Afirma que el Gobierno «no se expresa a través de fuentes anónimas» sino en la «mesa del Consejo de Ministros»
La ministra de Hacienda, María Jesús Montero, ha indicado este martes que el retraso en la aprobación del nuevo paquete de ayudas de 11.000 millones de euros, que será ratificado en una sesión extraordinaria del Consejo de Ministros este viernes, se debe a cuestiones «puramente técnicas», por lo que ha negado «tensiones» o «dificultades de entendimiento» dentro del Gobierno.
Al término de la reunión del Consejo de Ministros, Montero desmintió de esta manera algunas de las informaciones aparecidas en prensa, que atribuían este retraso a un conflicto entre distintos miembros del Gobierno sobre el alcance de la cifra de las ayudas directas o por la gestión de las mismas por parte de las comunidades.
Según Montero, el retraso se debe a una cuestión «claramente y puramente técnica», al objeto de determinar algunos de los elementos «más complicados» en el terreno jurídico, y aseguró que «en ningún caso» es producto de algunas de las informaciones que se han publicado por parte de algunos medios de comunicación.
En este punto, dijo no tener dudas de que las fuentes de estos medios así se lo han trasladado, pero quiso desmentir que el aplazamiento del plan se deba a «conflictos» o «dificultades de entendimiento» dentro del Gobierno.
Montero, quien aseguró que quienes trasladan estas informaciones tendrán «intereses que nada tienen que ver con la realidad», reiteró que tanto su Ministerio, el de Hacienda, como el de Economía, que son los departamentos «más concernidos» y que más «directamente» están trabajando al respecto, han preferido ser «prudentes» y terminar de concretar los aspectos pendientes.
«No tienen que ver ni con tensiones ni con dificultades de entendimiento, sino con la propia dinámica de un decreto muy importante, que se distribuye en varios compartimentos y para terminar de afinar las sugerencias o comentarios por parte de los órganos consultados», añadió Montero, que afirmó que confía en que se trate del último paquete de ayudas, toda vez que avance el proceso de vacunación y la economía se recupere en el segundo semestre.
La ministra de Hacienda aseguró que no está culpando a los medios de «mentir», dado que entiende que tienen sus propias fuentes que así se lo trasladan, pero volvió a asegurar que el retraso se debe «exclusivamente a cuestiones técnicas».
ADMITE «TENSIONES» EN OTRAS OCASIONES, PERO NO EN ESTE DECRETO
De hecho, admitió que en otras ocasiones sí se han producido «tensiones» entre los socios del Gobierno, pero afirmó que este no ha sido el caso en el decreto de las ayudas, que se aprobará este viernes, junto con la ampliación de la moratoria de los concursos, que expira en marzo.
«Se lo puedo asegurar porque estoy dentro de esas personas que están trabajando en las cuestiones técnicas del decreto y tampoco tiene nada que ver con que unas medidas u otras representen más o menos endeudamiento (…), sino que se trata de acertar con el esquema que evite el cierre de empresas», añadió.
EL GOBIERNO NO MIENTE
Así, afirmó que «no es verdad» que haya discrepancias en el seno del Gobierno y quiso dejar claro que, aunque las fuentes que han traslado a la prensa informaciones contrarias puedan identificarse con el Ejecutivo, «el Gobierno cuando habla, se expresa aquí, en esta sala, en la mesa del Consejo de Ministros» y «no miente» ni se pronuncia «a través de fuentes anónimas».
Por último, Montero confirmó que una parte de los 11.000 millones de euros se destinará a ayudas directas, aunque no quiso adelantar la cifra, para evitar problemas de solvencia en las empresas y para que puedan atender su sobreendeudamiento o su pago a proveedores.