Mónica García asegura que la sanidad pública está preparada para acoger a los funcionarios procedentes de Muface
La ministra de Sanidad, Mónica García, ha asegurado que la sanidad pública está preparada para asumir a los empleados públicos procedentes del modelo Muface que en la actualidad reciben asistencia en la sanidad privada, «al igual que estuvo preparada para acoger a los pacientes durante la pandemia».
«La sanidad pública no se debilita por atender a más población, se engrandece. Primero fueron los inmigrantes, con la Ley de Sanidad Universal, los que iban a colapsar nuestro sistema sanitario, y ahora son los funcionarios», ha respondido García este martes en el Pleno del Senado a la pregunta formulada por la senadora del PP Inmaculada Hernández, sobre las medidas que el Gobierno tiene previsto adoptar para garantizar a los mutualistas de Muface una adecuada asistencia sanitaria.
La ministra ha confirmado que el Sistema Nacional de Salud (SNS) tiene capacidad para asumir el incremento del 2,12 por ciento de población que supondría el fin de Muface, al tiempo que ha criticado que «lo que colapsa la sanidad pública es la mala gestión, la corrupción, lo comisionistas, los recortes, la infrafinanciación y el maltrato a los profesionales». «No sabemos lo que pasará con la negociación, pero sí que sabemos que ahí estará siempre la sanidad pública para quien quiera, para quien la necesite», ha recalcado García.
Al hilo, ha explicado a la popular que las negociaciones de las aseguradoras privadas y el Ministerio de Transformación Digital y Función Pública están fuera de sus competencias como ministra de Sanidad, sin embargo ha recordado que el Gobierno ha incrementado un 17 por ciento el aseguramiento. «Han sido las aseguradoras las que han rechazado, las que han dejado a los mutualistas sin esa elección y las que la han dejado en una encrucijada. La razón, pregúntaselo a ellas. Yo supongo que es la rentabilidad. Supongo que los pacientes de Muface ya no les son rentables, no les salen las cuentas», ha destacado, a la vez que ha defendido que «a la sanidad pública siempre le salen las cuentas».
«DESMANTELAR MUFACE»
Por su parte, la senadora del PP Inmaculada Hernández ha criticado que la intención de la ministra es «desmantelar» a Muface, pese a «llevar funcionado 50 años bastante bien». «Actualmente la sanidad pública está tensionada. Tiene una serie de problemas estructurales que usted no ha arreglado. Faltan entre 5.000 y 7.000 médicos, faltan enfermeros, faltan hospitales, centros de salud, faltan recursos y usted en lugar de dotar a las comunidades autónomas de mayor presupuesto para que puedan prestar una sanidad pública de calidad, se centra en desmantelar Muface», ha lamentado Hernández.
Así, Hernández ha resaltado que las propuestas de Sanidad sobre Muface están generando «incertidumbre» a más de un millón y medio de funcionarios y a sus familias que «no saben qué va a pasar con su derecho a la asistencia sanitaria».
Para la popular , «el plan de acabar con Muface no obedece a criterios sanitarios ni a criterios médicos, sino a criterios estrictamente políticos». «Va a pasar a la historia como la peor ministra de Sanidad, la que por la tarde coge la pancarta de la marea blanca pidiendo una sanidad digna y por la mañana destroza a Muface y destroza y dinamita la sanidad pública», ha finalizado Hernández.
