Miles de personas salen a las calles de Brasil en apoyo a Bolsonaro y contra el Partido de los Trabajadores
RÍO DE JANEIRO, 21
Miles de personas han salido este domingo a las calles de las principales ciudades de Brasil para apoyar al candidato presidencial ultraderechista Jair Bolsonaro.
Los manifestantes han marchado bajo los lemas «Brasil por encima de todo, Dios por encima de todos» y «PT Não» (PT No, en portugués), en referencia al Partido de los Trabajadores del ex presidente Luiz Inácio Lula da Silva (2003-2011), preso por corrupción.
«Bolsonaro es la salvación de Brasil. El PT tiene a su líder en la cárcel, son unas ratas y es una vergüenza», ha dicho Dora Vavi, una jubilada presente en la manifestación de Río de Janeiro, donde el ex militar se haría con el 70% de los votos válidos, según una encuesta de Paraná Pesquisas.
Miles de personas se dieron cita en la playa de Copacabana de la ciudad carioca. La mayoría ha acudido vestida de amarillo, con camisetas en apoyo a Bolsonaro o de la selección brasileña. Las banderas nacionales se han contado por centenares.
El candidato ultraderechista se hizo con el 46% de los votos en la primera vuelta electoral, situándose a 17 puntos de su rival, Fernando Haddad (PT) y es el favorito de cara a los comicios del 28 de octubre.
La popularidad del ex militar ha crecido en los últimos meses en un Brasil hastiado de los políticos y de la corrupción, y asolado por la violencia. En 2017 se registraron más de 63.000 asesinatos, el récord por tercer año consecutivo.
«La violencia está desatada. Los turistas ya no quieren venir. No pasa una semana sin que te roben. Se trafica con todo. Este es el único país del mundo que libera criminales y homicidas, y ya estamos cansados de eso», comenta Fabio Cerazolo, un joven comerciante presente en la manifestación de Río.
A su espalda los organizadores del evento seguían lanzando consignas. «¡Nuestra bandera jamás será roja!», o «¡Lula está en la cárcel!», gritaban desde varios camiones acompañados por los asistentes a la marcha.
«Estamos viviendo hoy el peor escenario político y estamos obligados a virar ideológicamente. Hay 14 millones de desempleados. El dinero no circula. El pueblo no tiene nada», ha añadido Fabio Cerazolo.
Bolsonaro ha propuesto liberalizar la economía para aumentar el empleo, siguiendo las recetas económicas de su asesor financiero, Paulo Guedes.
El candidato plantea, además, mano dura contra la violencia, dando armas a la población, empoderando a la policía y aumentando las penas, especialmente para homicidas y violadores.
Los detractores del candidato ultraderechista lo califican de racista, machista, militarista y homófobo, debido a las polémicas frases que ha vertido durante sus años de diputado en los medios de comunicación del país.
Algunas de sus declaraciones han causado especial polémica. A una diputada del PT que le tildó de «violador», por supuestamente incentivar dicha práctica, le respondió que «jamás la violaría, porque no lo merece». Pronunció la frase en 2003 y volvió a repetirla en 2014.
«No sé de dónde han sacado que es machista. Él adora a las mujeres y lo hace todo por ellas. La izquierda ha pregonado esa mentira pero él no es machista», ha comentado la docente Gea Nani durante la manifestación de Río de Janeiro.
«Voy a votar por Bolsonaro porque está a favor de la familia, del orden y de las buenas costumbres», ha añadido.
Bolsonaro ha logrado el apoyo de importantes líderes evangélicos y se ha convertido en un líder para quienes defienden la familia tradicional.
«Nuestra familia está siendo destruida por la izquierda y por la ideología de género. Necesitamos rescatar el respeto, para los mayores, para las buenas costumbres y para los profesores. Sin profesores no hay nada», ha dicho Gea Nani.
Los seguidores de Bolsonaro se concentraron también en ciudades como Brasilia, donde asistieron 25.000 personas según la Policía Militar, San Pablo o Belo Horizonte. Los fueron organizados por los movimientos de derecha o antipetistas Vem para Rua, Brasil Livre y Avança Brasil.
Bolsonaro es el principal favorito de cara a la segunda vuelta electoral. Marcó un 59% de intención de voto en una encuesta de la agencia Ibope, realizada sobre votos válidos. Su rival, Haddad, se haría con el 41% de los votos, según el mismo sondeo.
No habrá, finalmente, debate a dos. Bolsonaro ha argumentado que los médicos se lo impiden tras haber sido apuñalado a principios de septiembre durante una manifestación. Su decisión de no acudir a los debates ha sido muy criticada por Haddad y el PT.