Marta Lucía Ramírez apela a la «responsabilidad» para dar carpetazo a sus aspiraciones electorales en Colombia
La vicepresidenta y ministra de Exteriores de Colombia, Marta Lucía Ramírez, ha descartado una posible candidatura presidencial en las elecciones de 2022 y ha señalado que, por «responsabilidad», seguirá como número dos de Iván Duque durante el próximo año.
«Está primero la responsabilidad que las aspiraciones personales», ha sentenciado Ramírez, en un encuentro organizado en Madrid por Europa Press en el que ha justificado la decisión que hizo pública en mayo, cuando debía decidir si quería «acompañar» a Duque lo que resta de mandato o lanzaba de nuevo una candidatura propia.
En este sentido, ha explicado que «si uno tiene aspiración a participar (en las elecciones), debe retirarse un año antes», por lo que el plazo límite venció el 26 de mayo. Entonces, entendió que el país se encuentra en un «momento difícil» y que, por tanto, lo mejor era seguir en su puesto actual.
Ramírez aspira a que el actual Gobierno culmine la tarea «lo mejor posible» para garantizar el mayor crecimiento posible y evitar el «riesgo» que supone el populismo, una «enfermedad» que «se contagia» y que considera ya inoculada en otros países de la región.
Colombia nunca antes ha tenido a una mujer como jefa de Estado, pero la vicepresidenta cree que las medidas políticas adoptadas en aras de una mayor inclusión pueden ser claves para el futuro. En concreto, ha citado la obligatoriedad de que los partidos presentes listas paritarias para los comicios de 2022.
«La presencia de más mujeres en política (…) sin duda va a mejorar la política y las posibilidades de la democracia», ha dicho Ramírez, quien ha apuntado que, con más mujeres en puestos de poder, podría haber habido «grandes diferencias» en materia de gestión en este último año, marcado en todo el mundo por la pandemia de COVID-19.
Además de la inclusión de las mujeres, Ramírez también ha apostado por incorporar a los jóvenes a un desarrollo que espera relanzar en los próximos meses –«el manejo económico no puede estar limitado a unos indicadores macro»–, por ejemplo favoreciendo la educación gratuita en estudios superiores.
La canciller colombiana ha defendido los esfuerzos del Gobierno en materia de lucha contra la corrupción o emprendimiento económico y ha dicho estar «obsesionada» con la cuestión de la «informalidad» laboral.