María Chivite devuelve a los socialistas a la Presidencia de Navarra 23 años después
La líder del PSN, que comenzó como edil en su localidad natal, ha convencido a Ferraz de que le permita pactar con los nacionalistas
PAMPLONA, 2
María Chivite (Cintruénigo, 1978), secretaria general del PSN y elegida presidenta de Navarra este viernes, ha llevado a los socialistas navarros a la Presidencia de la Comunidad foral 23 años después.
Líder en sintonía con el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, fue elegida en 2003 concejala en su localidad natal y desde entonces ha sido elegida parlamentaria foral en 2007, senadora en 2011, secretaria general del PSN en 2014 y parlamentaria foral en 2015.
En los últimos cuatro años, en los que Navarra ha estado gobernada por un cuatripartito encabezado por Uxue Barkos, la líder socialista ha repetido en numerosas ocasiones el mismo mensaje, que no facilitaría un Gobierno de la derecha y que quería presidir lo que califica como un Ejecutivo «progresista», y ha convencido a la dirección federal del PSOE para que le permitiera pactar con los nacionalistas.
Desde que en 1996 el socialista Javier Otano dimitiera como presidente de Navarra al conocerse una cuenta a su nombre en Suiza, se han sucedido en la Comunidad foral las presidencias de Miguel Sanz (UPN), Yolanda Barcina (UPN) y Uxue Barkos (Geroa Bai), mientras que el PSN ha estado en distintos momentos en la oposición, ha facilitado gobiernos de UPN e incluso ha estado en un Gobierno de coalición con la formación regionalista.
En 2007, la dirección del PSOE vetó la posibilidad de que el entonces candidato socialista Fernando Puras pactara con el nacionalismo vasco para presidir Navarra y el PSN finalmente facilitó un Gobierno de UPN presidido por Miguel Sanz. En 2011, el PSN pactó un Gobierno de coalición con UPN, liderado por Yolanda Barcina.
María Chivite ha aprovechado su crecimiento electoral el 26 de mayo, pasando de ser la quinta a la segunda fuerza de la Cámara navarra, para rechazar un entendimiento con Navarra Suma y pactar con Geroa Bai, Podemos e Izquierda-Ezkerra, lo que, sumado a la abstención de EH Bildu, le ha dado la Presidencia.
La dirigente socialista, que inicialmente se decantó por Eduardo Madina para liderar el PSOE en 2014, ha respaldado posteriormente sin fisuras a Pedro Sánchez y, de hecho, la sintonía entre el PSN y Ferraz ha sido clave para que la líder socialista haya sido investida presidenta de Navarra.
Además del buen entendimiento entre María Chivite y Pedro Sánchez, el PSN también ha tenido a su favor el papel del socialista navarro Santos Cerdán, situado en un puesto de relevancia en la dirección del PSOE -secretario ejecutivo de Coordinación Territorial- y en la línea del camino elegido por María Chivite.
Santos Cerdán ha insistido en numerosas ocasiones en que el Partido Socialista no facilitaría un Gobierno de Navarra Suma y ha hablado abiertamente de pactar con Geroa Bai, con Podemos y con Izquierda-Ezkerra.
SIN MAYORÍA EN LA CÁMARA
María Chivite presidirá un Gobierno de coalición que tendrá 13 departamentos, ocho para el PSN, cuatro para Geroa Bai y uno más para Podemos. Izquierda-Ezkerra, la cuarta fuerza que ha apoyado a Chivite en su investidura, ha declinado entrar en el Ejecutivo.
El Gobierno no tiene mayoría en el Parlamento de Navarra. El PSN ha firmado un programa de legislatura con Geroa Bai, Podemos e Izquierda-Ezkerra, pero la suma de los cuatro partidos es de 23 escaños, a tres de la mayoría absoluta. Navarra Suma tiene 20 parlamentarios y EH Bildu otros siete.
Por tanto, Chivite no tiene garantías para sacar adelante proyectos de relevancia como los Presupuestos Generales de Navarra y necesariamente deberá contar con Navarra Suma o con EH Bildu para su aprobación.