Malí amenaza a Francia con recurrir a la «legítima defensa»
El ministro de Exteriores de Malí, Abdoulaye Diop, ha afirmado este martes que el Gobierno militar del país recurriría a la legítima defensa en el caso de que Francia «continúe socavando» la soberanía de su territorio.
«El Gobierno de Malí se reserva el derecho de recurrir a la legítima defensa, de conformidad con el artículo 51 de la Carta de Naciones Unidas (…) si Francia continúa socavando la soberanía de Malí, su integridad territorial y su seguridad nacional», ha asegurado Diop, según un comunicado de la diplomacia maliense.
El titular del Ministerio de Exteriores de Malí ha realizado estas declaraciones frente al embajador francés ante la ONU, Nicolas de Rivière, en una reunión del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas este martes en el que se ha discutido el informe trimestral del secretario general de Naciones Unidas sobre la situación en Malí.
En ese sentido, Diop ha repetido sus acusaciones sobre que Francia violó su espacio aéreo y entregó armas a militares islamistas, por lo que ha pedido que Naciones Unidas tome medidas.
«Sorprende que el informe del secretario general silencie la remisión de Malí al Consejo de Seguridad el 15 de agosto de 2022, en relación con los intentos de desestabilización y las reiteradas violaciones del espacio aéreo por las fuerzas francesas», ha afirmado.
El jefe de la Diplomacia maliense ha calificado estos actos como «agresión de extrema gravedad», mientras que ha recordado que constituyen una violación de la Carta de Naciones Unidas y del Derecho Internacional.
«No deben quedar sin acción, por lo que el Gobierno de Malí renueva su solicitud», ha agregado el ministro, al tiempo que ha indicado que presentará pruebas concretas de los crímenes de los que acusa a París. «Tiene que haber una reunión específica del Consejo de Seguridad que permita presentar pruebas concretas de los actos de duplicidad, espionaje y desestabilización de Francia», ha solicitado.
Rivière, por su parte, ha indicado que Malí «se encuentra hoy en una encrucijada» y que la misión de la ONU en el país es «una misión en peligro». «La amenaza ante todo es la seguridad. Los grupos terroristas están extendiendo su alcance y cobrándose cada vez más vidas», ha lamentado.
No obstante, el representante permanente de Francia ante Naciones Unidas ha celebrado «los primeros pasos» en el país africano, que llegó a un acuerdo con la CEDEAO para establecer el Gobierno de transición posterior al golpe de Estado.
Tanto Diop como Rivière, por otro lado, han expresado sus condolencias durante sus discursos por el reciente ataque terrorista con un artefacto explosivo que se cobró la vida de varios cascos azules de la Misión Multidimensional Integrada de Estabilización de la ONU en Malí (MINUSMA) este lunes en la región de Kidal, en el norte de Malí.
La explosión se produjo durante una patrulla para rastrear minas en la zona de Tessalit. Desde que la misión de la ONU inició su despliegue en Malí, este tipo de bombas se han cobrado la vida de más de 75 militares.
GUTERRES CONDENA EL «ATENTADO» PERPETRADO EN MALÍ
El secretario general de la ONU, António Guterres, ha condenado de manera enérgica el «atentado» llevado a cabo con artefactos explosivos improvisados perpetrado el lunes contra una patrulla de la MINUSMA, cobrándose la vida de cuatro personas.
Guterres ha mandado su más «sincero pésame» al Gobierno y al pueblo de Chad, puesto que las cuatro personas muertas eran miembros de la MINUSMA provenientes de Chad. Además, ha expresado su simpatía a las familias de las víctimas y ha deseado una «completa y rápida» recuperación a los dos miembros de las fuerzas de paz que resultaron heridos en el ataque.
«El secretario general recuerda que los ataques al personal de mantenimiento de la paz de Naciones Unidas pueden constituir crímenes de guerra según el Derecho Internacional», reza un comunicado emitido por el portavoz de la Secretaría General de la ONU, Stéphane Dujarric.
Asimismo, el secretario general de Naciones ha pedido a las autoridades malienses que hagan «todo lo posible» por identificar a los autores del ataque para que sean llevados ante la justicia.
Durante la jornada del lunes se registraron dos ataques separados con artefactos explosivos en la región maliense de Kidal, cobrándose la vida de cuatro personas e hiriendo a otras dos.
«El 17 de octubre un despreciable ataque con artefactos explosivos improvisados se cobró la vida de tres pacificadores (…) Otro soldado sucumbió a sus heridas el martes», ha señalado MINUSMA en su perfil oficial de Twitter.
Malí, al igual que otros países del Sahel, ha registrado en los últimos años un número creciente de ataques yihadistas obra tanto de la filial de Al Qaeda en la región como de la de Estado Islámico. Estas acciones terroristas han derivado a su vez en un aumento de la violencia intercomunitaria y provocado el desplazamiento de decenas de miles de personas.