LVMH culmina la compra de Tiffany y nombra una nueva cúpula directiva
El gigante francés del lujo LVMH (Moët Hennessy Louis Vuitton) ha completado este jueves la adquisición de la cadena estadounidense de joyerías Tiffany, pactada en unos 15.700 millones de dólares (12.800 millones de euros) y ha anunciado el nombramiento de una nueva cúpula directiva, que estará liderada por Anthony Ledru, quien reemplazará como consejero delegado a Alessandro Bogliolo.
Al mismo tiempo que confirmaba el cierre de la transacción, la francesa ha comunicado una serie de cambios en la dirección de Tiffany, incluyendo la designación inmediata como consejero delegado de la firma joyera de Anthony Ledru, quien en el pasado fue vicepresidente senior para Norteamérica de Tiffany y que más recientemente había desempeñado el cargo de vicepresidente ejecutivo y responsable de actividades comerciales globales de Louis Vuitton.
Alessandro Bogliolo, actual consejero delegado de Tiffany, ha aceptado seguir en la empresa hasta el próximo 22 de enero para facilitar la transición, tras lo que abandonará la compañía.
Asimismo, LVMH ha nombrado como vicepresidente ejecutivo de Tiffany responsable de productos y comunicación a Alexandre Arnault, hijo de Bernard Arnault, quien había desempeñado la dirección de la firma de equipajes Rimowa. De su lado, Michael Burke, presidente y consejero delegado de Louis Vuitton, se convertirá en presidente del consejo de Tiffany.
Una vez completada la adquisición de Tiffany, esta pasará a engrosar el portafolio de 75 marcas LVMH como parte de la división de relojes y joyas de la compañía francesa.
«Tiffany es una marca icónica y un emblema por excelencia del sector mundial de la joyería», ha destacado Bernard Arnault, presidente y consejero delegado de LVMH. «Somos optimistas sobre la capacidad de Tiffany para acelerar su crecimiento, innovar y permanecer a la vanguardia», añadió.
A finales del pasado mes de octubre, LVMH selló un acuerdo con Tiffany para rebajar el precio de su oferta de compra a 131,50 dólares en efectivo, frente a los 135 dólares acordados en noviembre de 2019, reduciendo así el importe de la transacción a unos 15.700 millones de dólares, frente a los 16.200 millones de dólares (13.214 millones de euros) previstos inicialmente.