Los talibán vuelven a acusar a EEUU de violar el acuerdo de paz tras varios bombardeos en Afganistán
Los talibán han acusado nuevamente este lunes a Estados Unidos de violar el histórico acuerdo de paz firmado el 29 de febrero de 2020 con sus últimos bombardeos contra posiciones de los insurgentes en las provincias afganas de Helmand (sur) y Nangarhar (este), en la víspera del inicio de la nueva ronda de contactos entre el grupo y el Gobierno de Afganistán.
«Las fuerzas estadounidenses han llevado a cabo repetidos bombardeos contra los muyahidín del Emirato Islámico en Nangarhar y Helmand durante los últimos días», ha denunciado el portavoz del grupo, Zabihulá Muyahid, quien ha resaltado que las fuerzas afganas han lanzado operaciones en Kandahar «con apoyo aéreo estadounidense».
Así, ha manifestado en un comunicado publicado a través de la página oficial de los talibán que «estos bombardeos han sido llevados a cabo en zonas no militares», en lo que ha descrito como «violaciones recurrentes» por parte de Washington.
Muyahid ha apuntado además que esto tiene lugar después de que el secretario de Estado estadounidense, Mike Pompeo, afirmara que «ningún militar estadounidense ha muerto en Afganistán desde hace casi un año», lo que los talibán consideran «un reconocimiento del compromiso del Emirato Islámico con el acuerdo de Doha».
«El Emirato Islámico advierte nuevamente de que si los bombardeos y las operaciones en Kandahar no se detienen inmediatamente o si los bombardeos y las operaciones continúan contra los muyahidín, en violación de los anexos del acuerdo, los muyahidín del Emirato Islámico se verán forzados a responder con seriedad», ha dicho. Toda la responsabilidad recaerá sobre los hombros estadounidenses», ha zanjado.
Los talibán han acusado en varias ocasiones a Estados Unidos de violar el acuerdo con sus bombardeos, si bien Washington ha defendido en todo momento que está respetando el pacto y que únicamente actúa en defensa de las fuerzas de seguridad afganas, lo que está contemplado en el documento.
El país centroasiático se ha visto sumido en un repunte de la violencia durante los últimos meses a pesar del acuerdo entre los talibán y Estados Unidos y de las conversaciones de paz entre el grupo y el Gobierno afgano, que se retomarán este mismo martes en la capital de Qatar.
En este contexto, al menos dos policías han muerto a primera hora de este lunes tras estallar una bomba en la ciudad de Jalalabad, capital de la provincia de Nangarhar, según la oficina del gobernador provincial. El objetivo ha sido un vehículo policial, tal y como ha recogido la cadena de televisión afgana Ariana.
Por otra parte, un miembro de las fuerzas de seguridad ha resultado herido a causa de la explosión de una bomba al paso de su vehículo en la capital, Kabul. Por el momento ningún grupo ha reclamado la autoría de estos dos ataques.
Las autoridades afganas han acusado además a los talibán de violar el acuerdo sobre la liberación de 5.000 insurgentes de cara a las conversaciones y han resaltado que uno de ellos ha muerto en combate durante los últimos días en Nangarhar.
El acuerdo de liberación, que allanó el camino para las conversaciones de paz y que fue exigido por los talibán como un paso previo para las mismas –dado que figuraba como parte del acuerdo con Estados Unidos–, recoge que los excarcelados se comprometían a no volver a participar en operaciones armadas.