Los médicos volverán a operar por las tardes tras alcanzar un acuerdo con el Gobierno
PRC, PSOE y Vox critican la reforma fiscal del PP: «No salen las cuentas»
SANTANDER, 2
El Gobierno de Cantabria (PP) ha llegado a un acuerdo con los médicos para retomar la actividad extraordinaria de operaciones, consultas y pruebas que se programan en los hospitales por las tardes con el objetivo de reducir las listas de espera.
El colectivo decidió el pasado mes de febrero dejar de prestar este servicio por la falta de actualización de las tarifas de las operaciones, las llamadas peonadas , que se empezarán a programar de nuevo «de manera inmediata» tras un acuerdo alcanzado hoy, según ha anunciado la presidenta cántabra, María José Sáenz de Buruaga, en el Pleno del Parlamento.
Los médicos, tras rechazar las ofertas que les hizo el Gobierno anterior para tratar de poner fin a su parón, cuando la Consejería de Sanidad estaba en manos del PSOE, paralizaron la actividad extraordinaria y voluntaria de las tardes a la espera de negociar con el nuevo Gobierno regional que saliera de las urnas en las elecciones autonómicas el 28 de mayo.
Así ha sido una vez que se ha conformado el nuevo Ejecutivo en manos del PP, si bien la presidenta no ha avanzado en qué términos se basa el acuerdo.
Buruaga ha hecho este anuncio en respuesta a preguntas de la oposición sobre el plan que tiene su Gobierno para mantener la calidad de los servicios públicos y la inversión en los proyectos de la comunidad con la reducción de ingresos que prevé la reforma fiscal que presentó la semana pasada, que pretende que los cántabros paguen 90 millones de euros menos al año en impuestos.
Todos los grupos de la Cámara le han hecho preguntas al respecto en el Pleno de hoy ya que opinan que «no salen las cuentas», si bien la presidenta ha hecho este anuncio en la última, del PSOE, al que ha reprochado que su Gobierno trabaja para mejorar los servicios públicos sin «hacer demagogia».
«Es hablar menos y hacer más», ha respondido al portavoz socialista, Pablo Zuloaga, señalando que recuperar la actividad extraordinaria tiene como objetivo «poner a pleno rendimiento nuestros hospitales públicos y reducir las peores listas de espera quirúrgica, de prueba diagnóstica y de consulta de especialista de la historia son las que ha dejado usted».
Además, ha remarcado que en dos meses en el Ejecutivo el PP ha mejorado las condiciones laborales de los profesionales sanitarios con el desbloqueo del proceso de estabilización, anunciado hoy, ha mejorado el servicio de reproducción asistida de Valdecilla, ha recuperado el sistema de libre elección en las residencias de mayores o implantado la prestación del asistente personal para las personas dependientes en situación de discapacidad.
REFORMA FISCAL
Así lo ha dicho ante las críticas de todos los grupos de la oposición, PRC, PSOE y Vox, que creen que no es posible, como sostiene el PP, bajar todos los impuestos, no hacer recortes e incluso aumentar la inversión en áreas como Sanidad o Educación.
Sin embargo, la presidenta les ha respondido que parten de la «premisa errónea» de que se reducirán los ingresos, ya que defiende que la rebaja de impuestos servirá para atraer más inversores, aumentar el consumo de las familias, crear más puestos de trabajo y por tanto aumentar el número de contribuyentes y generar riqueza.
Desde el PRC, el diputado Pedro Hernando ha criticado que la rebaja solo «beneficia a unos pocos», que son los que tienen rentas por encima de 60.000 euros al año, ya que a esos «se les ponen en el bolsillo casi 300 euros» al mes mientras que a los que ganan entre 13.000 y 21.000 euros les supondrá «16 euros» de ahorro. «Eso va a servir para cambiar la economía, aumentar el consumo familiar y la inversión empresarial», ha ironizado.
En la misma línea, Zuloaga ha apuntado que la bajada de impuestos no afecta a las rentas inferiores a 13.000 euros, que no están obligados a hacer la declaración, y que son «los que más podrían necesitar» esa ayuda.
También la portavoz de Vox, Leticia Díaz, ha advertido al PP que «no salen las cuentas» y que «es imposible» mantener los servicios y los grandes proyectos de Cantabria –como el nuevo MUPAC, el polígono de La Pasiega o la unidad de protonterapia en Valdecilla, que según ha calculado suman 255 millones de inversión– sin reducir nada el gasto.
Todos los portavoces han subrayado que los efectos de la rebaja se empezarán a notar en 2026.
Además, en el Pleno de hoy también se ha debatido una proposición no de ley (PNL) del PSOE que pedía, al hilo de la reforma fiscal del PP, garantizar la prestación de servicios públicos fundamentales con niveles de calidad, equidad y suficiencia sin merma de recursos.
La iniciativa no ha salido adelante ya que PP y Vox han votado en contra y el PRC se ha abstenido. La exconsejera de Economía, Ana Belén Álvarez, ha defendido la iniciativa advirtiendo que el coste de los servicios en Cantabria, por su orografía y población, es superior al de otras comunidades, por lo que ha llamado a no perder fuentes de ingresos como, por ejemplo, los que llegan del Impuesto sobre el Patrimonio que el PP quiere eliminar, lo que supondría recibir unos 20 millones de euros menos al año.
«No debemos hipotecar el futuro de nuestros hijos con una política fiscal que ponga en riesgo las cuentas publicas y no podemos seguir endeudando a la comunidad», ha defendido.
Mientras, el PP ha respondido cuestionando si con servicios públicos de calidad se refieren a «los suyos; sin médicos en muchos municipios o con la listas de espera más altas de España». «Lo del PSOE es de manual: subir impuestos y recaudar más», ha sentenciado Carlos Caramés, que ha acusado al anterior Gobierno de «subir impuestos a los cántabros» en sus ocho años de Gobierno para financiar una «red clientelar».
La reforma fiscal también ha salido a colación en una interpelación del PRC al consejero de Fomento, Roberto Media, ya que la regionalista Paula Fernández le ha pedido que ponga en marcha ayudas para paliar el coste del carburante a los transportistas y el popular ha respondido que con la bajada de impuestos van a «inyectar en la economía» 370 millones de euros que quedarán «en los bolsillos de los cántabros» los próximos cuatro años y que van a «ayudar a compensar» las subidas de precios que están sufriendo.
Media ha reprochado al PRC que pida al PP medidas que no puso en marcha cuando gobernaba a pesar de que el verano pasado el carburante alcanzo los dos euros por litro, además de que cree que «equivoca el tiro» ya que a quien debe reivindicar esas ayudas es al Gobierno central. De hecho, ha dicho que él mismo ha remitido una carta al Ministerio para pedir que se recupere el descuento de 20 céntimos por litro.