Los hombres de países ricos miden 23 centímetros más que aquellos que viven en regiones más pobres
Los hombres de países ricos miden 23 centímetros (cm) más que aquellos que viven en regiones más pobres, una diferencia que ha ido creciendo 1,5 cm en los últimos 30 años, según una investigación realizada por expertos del Centro de Investigación Ecológica y Aplicaciones Forestales.
Esto se explica, según los autores, en el hecho de que la dieta rica en productos de origen animal y más variada asegura que los países ricos reciban prácticamente el doble de kilos de nitrógeno y fósforo al año que los países pobres.
Para llegar a esta conclusión, publicada en la revista Scientific Reports , los investigadores han utilizado datos mundiales de 80 países diferentes de entidades como la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación (FAO, por sus siglas en inglés) de hombres nacidos entre los años 60, 70 y 80.
Concretamente, el trabajo ha comprobado que la altura media de los hombres varía mucho entre países y que esta variación está relacionada con el producto interior bruto de cada país. En promedio, hay una diferencia de 23 cm entre los países con gente más alta (Dinamarca y los Países Bajos, con una media de 1,83 m de altura) y los países con gente más baja (Guatemala y Vietnam con una media de 1,60 m).
De hecho, la diferencia de altura entre las personas de los países ricos y la de los países pobres (según su PIB) ha aumentado 1,5 cm los últimos 30 años. A la vez, el estudio ha comprobado que esta relación va mucho más ligada a la ingesta de kilos per cápita de nitrógeno y fósforo que a otros factores como la cantidad de calorías diarias.
Y es que, los países ricos reciben más kilos de nitrógeno y fósforo a través de la dieta anualmente (19,5 kg de nitrógeno y 2,17 de fósforo) que los países pobres (9,66 kg de nitrógeno y 1,35 de fósforo). Además, durante el período entre 1961 y 2009 los países con más PIB aumentaron su ingesta de nitrógeno un 12 por ciento mientras que los de menor PIB sólo lo pudieron hacer un 7 por ciento (en el caso del fósforo, la diferencia sólo fue de un 1%).
«Las personas nacidas en países con un PIB más alto disfrutan de una dieta más variada e ingieren más proporción de productos de origen animal que productos de origen vegetal. Esto hace que reciban más cantidad de nitrógeno y fósforo y, además, tengan una proporción entre nitrógeno y fósforo más alta. Los alimentos vegetales que reciben también son de mayor calidad y por lo tanto tienen mayor cantidad de estos nutrientes», han explicado los expertos.