Los dos principales candidatos a la Presidencia en Mozambique votan en una jornada marcada por la calma
Los dos principales candidatos a la Presidencia de Mozambique, el actual mandatario, Filipe Nyusi, y el líder de la opositora Resistencia Nacional Mozambiqueña (RENAMO), Ossufo Momade, han acudido ya a votar, en una jornada marcada por la calma.
Nyusi, quien ha votado en la capital, Maputo, ha destacado la «serenidad y espíritu pacífico» de la población y ha resaltado que se trata de las elecciones en las que «hay más observadores» internacionales.
Así, ha indicado que en las últimas presidenciales, celebradas en 2014, hubo 10.000 observadores, mientras que en las de este año hay 40.000, lo que, a su juicio, «significa que el país está abierto a todos».
Por su parte, Momade ha votado en Isla de Mozambique, situada en la provincia de Nampula (norte), desde donde ha pedido a la población que vote masivamente, según ha informado el diario mozambiqueño O Pais .
«La población es la que tiene el poder», ha manifestado, antes de pedir al Ejército que «respete el voto popular». «Estas elecciones deben depender de la votación popular. De lo contrario, no vamos a aceptar resultados manipulados, y no queremos volver a tener los problemas del pasado», ha remachado.
El país celebra este martes elecciones presidenciales, legislativas y provinciales, las primeras desde la firma en agosto de un acuerdo de paz entre los dos principales partidos del país, sacudido además por la insurgencia islamista en el norte y aún recuperándose del paso de dos devastadores ciclones este mismo año.
La política del país africano ha estado marcada desde hace décadas por el enfrentamiento entre el Frente de Liberación de Mozambique (FRELIMO) y la RENAMO, que estalló en 1977, durante la Guerra Fría y dos años después de que Mozambique se independizara de Portugal.
El FRELIMO, que surgió como un partido de corte marxista-leninista que pasó posteriormente al socialismo democrático, se enfrentó a la RENAMO, surgido como un movimiento anticomunista respaldado por Rodesia y la Sudáfrica del Apartheid, entre 1977 y 1992, en un conflicto que dejó cerca de un millón de muertos y que concluyó con un frágil acuerdo de paz firmado en Roma.
A raíz del mismo se celebraron las primeras elecciones multipartidistas en 1994 y, desde entonces, el FRELIMO se ha impuesto en todos los comicios, en medio de las denuncias de la RENAMO, que en ocasiones ha vuelto a las armas para defender lo que describe como una marginación política y económica del grupo y sus seguidores.
En esta ocasión, los comicios se celebrarán según los términos del reciente acuerdo de paz, que contempla –además de la desmovilización de los guerrilleros de la RENAMO y su integración en el Ejército– que los gobernadores sean elegidos por el partido que gane en cada provincia, y no por el Ejecutivo central.
Esta situación da al partido opositor la posibilidad por primera vez de acceder a los gobiernos provinciales, si bien se teme que unos malos resultados –espera imponerse en tres o cuatro de las once provincias del país, todas ellas en la zona centro– deriven en una mayor tensión interna en la RENAMO y un nuevo colapso del acuerdo de paz.
Las elecciones se presentan además como un termómetro de la popularidad de Nyusi, quien fue ministro de Defensa entre 2008 y 2014 antes de presentarse a las elecciones de ese año como candidato del FRELIMO, sucediendo así a Armando Guebuza, quien fue presidente diez años y abandonó la Presidencia con unos bajos índices de aprobación.
Junto a Nyusi y Momade concurren a la Presidencia Daviz Simango, del Movimiento Democrático de Mozambique (MDM), y Mario Albino, de la Acción del Movimiento Unido para la Salvación Integral (AMUSI), una formación que en estos momentos no cuenta con representación parlamentaria.
Si bien ninguno de ellos parece contar con posibilidades reales de hacerse con la victoria en las presidenciales y sentarse en el Palacio de Ponta Vermelha, el MDM espera recabar unos resultados positivos en las provinciales, mientras que la AMUSI espera entrar al Parlamento mozambiqueño.