Los diputados de Unidas Podemos que entran al Gobierno no dejarán su escaño, salvo Victoria Rosell por incompatibilidad
Los diputados de Unidas Podemos que van a formar parte del nuevo Gobierno de coalición con el PSOE, ya sea como ministros o como secretarios de Estado, no tienen intención por el momento de dejar sus escaños, según han informado a Europa Press fuentes del grupo confederal.
La única que sí tendrá que renunciar a su acta de diputada, por ser incompatible con su futuro cargo de delegada del Gobierno para la Violencia de Género, será la magistrada en excedencia Victoria Rosell, diputada por Las Palmas. El escaño irá a parar, si no hay renuncias, a la siguiente en la lista, la exdiputada Meri Pita, secretaria de Plurinacionalidad de Podemos.
De este modo, a excepción de Rosell, el resto de diputados de Unidas Podemos que entran al Gobierno no van a renunciar a sus actas, empezando por el secretario general de Podemos y nuevo vicepresidente segundo de Derechos Sociales y Agenda 2030, Pablo Iglesias.
ECHENIQUE SÍ RELEVA A MONTERO EN LA PORTAVOCÍA
Como él, también conservará sus escaño la ministra de Igualdad, Irene Montero, aunque en su caso sí dejará de ejercer la portavocía del grupo parlamentario, que ya ha sido asignada al secretario de Acción Institucional de Podemos y diputado por Zaragoza, Pablo Echenique.
En la misma situación que Montero están la nueva ministra de Trabajo, la diputada por A Coruña de Galicia en Común Yolanda Díaz, y el ministro de Consumo y coordinador federal de Izquierda Unida (IU), Alberto Garzón, que conservarán sus actas, aunque hayan pasado a la bancada azul.
De la misma manera, las diputadas y dirigentes de Podemos Noelia Vera e Ione Belarra seguirán siendo parlamentarias además de secretarias de Estado, en el primer caso, de Igualdad dentro del ministerio de Montero, y en el segundo, de Agenda 2030, dependiente de la vicepresidencia de Iglesias.
Según las fuentes consultas, el partido morado no considera necesario que sus diputados renuncien a sus escaños por el hecho de haber entrado a formar parte del Gobierno, y nadie les ha pedido que así lo hagan. En todo caso, señalan que irán «evaluando» su situación a medida que vaya avanzando la legislatura.
NO HAY INCOMPATIBILIDAD LEGAL
No existe incompatibilidad legal entre ser ministro y diputado, pero en 2018, cuando el presidente Pedro Sánchez llegó a La Moncloa por primera vez tras triunfar la moción de censura contra Mariano Rajoy y su Gobierno se apoyaba en sólo 84 diputados socialistas, todos los nuevos ministros que hasta entonces habían sido parlamentarios dejaron sus escaños para evitar que su agenda de Gobierno interfiriera en las previsiblemente ajustadas votaciones del Congreso.
También ha sido tradición que los secretarios de Estado dejen de ser parlamentarios, si lo son, por la carga de trabajo y la disponibilidad que requiere el cargo. Pero no es obligatorio y de hecho con Rajoy mantuvieron el escaño los secretarios de Estado de Relaciones con las Cortes, José Luis Ayllón, y de director del Gabinete del presidente, Jorge Moragas.