Los avances en detección, pronóstico y abordaje de la esclerosis múltiple permiten personalizar cada vez más la terapia
Los avances en la detección, pronóstico y abordaje de la esclerosis múltiple (EM) permiten personalizar cada vez más su tratamiento, según han asegurado diversos expertos en el encuentro EMerald. Avances en Esclerosis Múltiple , organizado por Janssen Pharmaceutical Companies of Johnson & Johnson, con el aval científico de la SEN.
«La aplicación de biomarcadores en la práctica clínica rutinaria permitirá poder seleccionar mejor las terapias más efectivas desde el inicio en el tratamiento de la EM. De hecho, éste es uno los principales retos a los que se enfrenta la investigación», ha comentado el presidente de la Sociedad Española de Neurología (SEN), José Miguel Láinez.
En esta misma línea, el coordinador del Grupo de Enfermedades Desmielinizantes de la SEN, Miguel Llaneza, ha subrayado que en los últimos años se han desarrollado varios fármacos para modificar la historia natural de la enfermedad, con diferentes mecanismos de acción, vías de administración y perfiles de eficacia y seguridad, por lo que casi se puede individualizar el tratamiento de la enfermedad para cada paciente.
Más allá de los avances terapéuticos, en las últimas décadas se han confirmado otros aspectos, como es la importancia de tratar cuanto antes y con una terapia efectiva en los primeros años desde el diagnóstico, cuando aún es posible modificar el curso futuro de la enfermedad.
«La utilización precoz de tratamientos de alta eficacia se asocia a un mejor pronóstico a medio y largo plazo en términos de discapacidad. De hecho, estamos asistiendo a una mejoría en la situación funcional de los pacientes durante periodos más prolongados. Esto permite tratar de un modo más efectivo a un porcentaje importante de pacientes desde el principio», ha explicado Láinez.
Por su parte, Llaneza ha añadido que el diagnóstico y tratamiento precoces posibilitan modificar su curso natural a corto, medio y probablemente también a largo plazo y así retrasar la aparición de discapacidad en paciente que habitualmente son jóvenes, intelectualmente activos y en edad laboral, con el impacto que todo esto va a representar para su calidad de vida.
La fatiga, el dolor, las alteraciones sexuales y los problemas urinarios son algunos de los llamados síntomas invisibles de la EM, que es otro de los aspectos que se han tratado en este encuentro.»Desgraciadamente, disponemos de pocos tratamientos específicos para los síntomas asociados a la enfermedad y, sobre todo, para los denominados invisibles, como la fatiga, el dolor o las alteraciones de los esfínteres y cognitivas», ha enfatizado el doctor Llaneza.
En este sentido, los expertos han destacado la importancia del abordaje multidisciplinar frente a una enfermedad como ésta, que tiene tantas manifestaciones sintomáticas. «El neurólogo no puede hacer un adecuado manejo integral del paciente trabajando de manera individual. El papel del farmacéutico hospitalario es indispensable en el adecuado funcionamiento de estos equipos multidisciplinarios ya que ven a los pacientes con regularidad y pueden identificar de manera precoz la aparición de determinados efectos adversos de los tratamientos o la falta de adherencia de los pacientes a los fármacos», ha zanjado Llaneza.