Lobato justifica que PSOE apoye a Bildu en Pamplona y no en Euskadi: «El alcalde condenó a ETA mientras seguía matando»
Admite que las decisiones del PSOE y su relación con Bildu «no son cómodas para el partido»
El secretario general del PSOE, Juan Lobato, ha justificado por qué los socialistas apoyaron a Joseba Asiron (Bildu) para que se hiciera con la Alcaldía de Pamplona en una moción de censura contra el PP pero se han negado a respaldar al candidato de la formación abertzale a lehendakari, Pello Otxandiano.
«(Asiron) Condenó a ETA cuando ETA estaba matando y creo que ahí hay una diferencia sustancial», ha recalcado el líder de los socialistas madrileños durante una intervención en Antena 3 , recogida por Europa Press, en la que ha insistido en que hay «diferencias» entre la política municipal y la autonómica.
Ha defendido esta posición a raíz de la polémica surgida esta semana, última de la campaña de los comicios vascos, al calificar Otxandiano a ETA de «grupo armado» tras ser preguntado si la consideraba una organización terrorista. Posteriormente pedía perdón si con sus palabras había podido «herir la sensibilidad de las víctimas».
Frente a ello, Lobato ha reivindicado la figura del líder del PSE-EE, Eneko Andueza, cuya posición ha sido «nítida desde el minuto uno», asegurando que apoyaría al PNV. «Le queda bastante recorrido en términos democráticos. Yo además no lo entiendo (las declaraciones de Otxandiano) en términos éticos ni tampoco estratégicos», ha planteado Lobato.
Ante estas declaraciones, le han apuntado los pactos del PSOE en otras instancias, tanto los necesarios para sacar adelante la legislatura nacional como en el caso de Pamplona. Ha defendido que «una cosa es el planteamiento en Euskadi» y otra la realidad de la «situación parlamentaria».
«Yo creo que la estrategia es, oye, tenemos un proyecto de país, lanzamos iniciativas al Congreso y que cada partido sea responsable de lo que vota», ha indicado el socialista. Insistido por el caso de la capital navarra sostiene que «la política local tiene sus particularidades», pero que no esconde «que son decisiones complejas, que no son cómodas para el partido».