Licitada la rehabilitación de la Torre del Reloj en San Vicente para albergue de peregrinos
La Consejería de Turismo ha licitado las obras de rehabilitación de la Torre del Reloj, en San Vicente de la Barquera, para destinarlo a albergue de peregrinos por importe de 429.375 euros y un plazo de ejecución de diez meses.
Según ha informado este sábado el Gobierno, las obras supondrán una ampliación del espacio útil del edificio gracias a la actuación sobre la cubierta y bajocubierta. También se intervendrá en el exterior con elementos de construcción tradicional y teniendo en cuenta que la parcela se encuentra dentro del Plan Especial de Protección y Reforma Interior (PEPRI) de San Vicente y está catalogado como edificio con Conservación de fachada y volumen .
El consejero, Javier López Marcano, que ha destacado el valor turístico y cultural de San Vicente de la Barquera, ha insistido en la necesidad de potenciar toda la infraestructura de los caminos de peregrinación en Cantabria en esta villa, «que supone un enclave estratégico de primer orden», pues confluyen el Camino del Norte hacia Compostela y el Lebaniego hacia el Monasterio de Santo Toribio, «los dos caminos declarados Patrimonio de La Humanidad con los que cuenta Cantabria», ha recordado Marcano.
En la actualidad el edificio consta de dos plantas, con una biblioteca municipal en la baja, y un salón de actos y un área de informática en la primera. La estructura es de muros de piedra con forjado de hormigón en la planta baja y de madera en la planta primera. La cubierta es de madera, oculta por dos falsos techos, y se encuentra bastante deteriorada, con tablas desigualmente colocadas.
ACTUACIONES PREVISTAS
Las obras de rehabilitación incorporarán el espacio de bajocubierta a las dos plantas existente. Para ello se sustituirá la estructura de la cubierta, actualmente deteriorada, por una nueva que aumente ligeramente la escasa pendiente, favoreciendo la evacuación de fluviales.
También se ha proyectado un nuevo forjado sobre la primera planta y se procederá a instalar una plataforma elevadora que solvente el desnivel originado y así hacerlo accesible a las personas con problemas de movilidad.
La torre tiene el uso de albergar el reloj y los elementos de telecomunicación, y solo se actuará para aislar acústicamente la puerta de separación con el edificio que se encuentra en la primera planta.
El edificio dispondrá de una planta baja de espacios comunes, así como de un dormitorio accesible, llevándose el resto del programa a la planta primera y bajocubierta con los correspondientes espacios destinados al aseo, lavado y almacenamiento. El nuevo albergue dispondrá de una capacidad para 20 personas.
El aspecto exterior del edificio respeta su imagen original en la facha sur, manteniendo los huecos existentes. El resto de las fachadas carecen de huecos, así que se abrirán dos nuevos al este que permitirán mejorar las condiciones higiénicas-sanitarias del nuevo albergue. Al norte, la fachada ciega se encuentra salpicada por numerosos elementos de instalaciones. Se mantendrá la piedra vista y la teja cerámica, así como la carpintería de madera con contraventanas interiores y balconeras de forja.
Está previsto que la actuación incluya el remate del muro en línea con la construcción tradicional, con una pieza de sillería que unifique el alero recto de la fachada sur. Se procederá a desmontar la cubierta y sobre el muro de mampostería existente se rellenarán los huecos dejados por los cabrios para marcar la línea de cornisa y formar una cubierta con la misma pendiente que la actual.
El acceso se realiza a nivel de calle y en el vestíbulo se salvará el desnivel de la planta baja con seis escalones y una plataforma elevadora, dando paso a la zona común o a la escalera general para acceder a los dos pisos superiores y la zona de baños y duchas con un baño completo adaptado.
En la planta primera se distribuirá un único dormitorio con literas, con una zona sur con capacidad para seis personas y otro al norte para 12, con dos baños y una zona común de almacenamiento para ropa, mochilas y botas.
En el espacio bajocubierta se ubicarán los espacios necesarios para las instalaciones del edificio. Dispondrá de un espacio bajocubierta libre, abierto a la planta interior que le proporcionará más luz y ventilación. Mediante la apertura de un hueco al este y de los nuevos huecos en cubierta, se conseguirá aumentar la iluminación y ventilación natural, así como enriquecerlo al dotarlo de una doble altura.