Legalsha apuesta por la IA para seguir creciendo en reclamaciones contra entidades financieras
El despacho Legalsha ha apostado por implementar herramientas de inteligencia artificial (IA) de cara al año que viene para apuntalar su negocio de reclamaciones contra entidades financieras, según ha informado la firma en un comunicado.
El objetivo es usar la IA para poder identificar antes qué expedientes cumplen los criterios para negociación y son aptos para poder ir por la vía extrajudicial o, por el contrario, detectar qué casos deben ir al departamento de redacción de demandas e ir por la vía judicial.
Legalsha confía en el entrenamiento al que han sometido a la IA, que tiene acceso a los acuerdos ya cerrados y conoce los parámetros establecidos para validar si una reclamación es apta para vía extrajudicial o si tiene que seguir el recorrido ordinario en un tribunal.
Durante este año, el despacho ha logrado un retorno económico de 10 millones de euros para clientes y colaboradores. Esta cifra corresponde acuerdos extrajudiciales, sentencias firmes y otras resoluciones que han supuesto compensaciones económicas.
Respecto a la actividad del despacho en el año, se han logrado 10.000 acuerdos extrajudiciales en reclamaciones contra entidades en 2025. Desde que el despacho se fundó en 2020 ha logrado más de 30.000 acuerdos de este tipo.
«La vía extrajudicial permite al consumidor obtener resultados más rápido, reduce costes innecesarios para las financieras y alivia la carga de los juzgados. Cuando la banca y los consumidores negocian sobre bases claras, todos ganan en tiempo, certidumbre y costes», ha afirmado el consejero delegado de Abogados Legalsha, Rebin Shamamy.
En 2025, el 61% de los expedientes gestionados y resueltos de forma extrajudicial correspondieron a micropréstamos de contratación rápida, seguidos de gastos de formalización de hipotecas (18%); tarjetas revolving (15%) y financiación de vehículos (6%).
Legalsha ha señalado, de cara al año que viene, que ya está detectando un incremento significativo en reclamaciones relacionadas con el crédito al consumo digital, especialmente préstamos asociados a plataformas de comercio electrónico, sistemas Buy Now Pay Later (BNPL) o microcréditos con intereses elevados o estructuras de reembolso complejas
