Laya niega problemas ante el malestar de los diplomáticos por el retraso en nombrar a embajadores

Las jefaturas de las embajadas de India, Reino Unido y Bosnia están vacantes tras la jubilación de sus titulares

La ministra de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación, Arancha González Laya, ha asegurado que el ritmo de nombramientos de nuevos embajadores transcurre con total normalidad después de que los diplomáticos hayan expresado su malestar por el hecho de que embajadas como las de India y Reino Unido no tengan jefe de misión desde hace meses tras la jubilación del anterior.

El nombramiento de los embajadores es una de las potestades que tiene el titular del Ministerio de Asuntos Exteriores, UE y Cooperación pero el ritmo con el que la ministra está cubriendo los puestos vacantes y nombrando a los jefes de misión ha generado cierto malestar e inquietud entre los diplomáticos, según han comentado algunos de ellos a Europa Press.

A las jubilaciones de tres embajadores desde octubre –los de India, Reino Unido y Bosnia–, se sumarán en mayo la de los jefes de misión en Irán y Rusia, mientras que aún está pendiente de conocerse el reparto de embajadas previsto para este año, alrededor de una treintena en total, quienes ya han cubierto los plazos de entre unos tres y cinco años que suelen permanecer en sus puestos.

La semana pasada la ministra aprobó el conocido como bombo , es decir, el reparto de las plazas en el extranjero de distinto rango a las que pueden optar los miembros de la Carrera Diplomática en función de su escalafón, que fueron publicados en el BOE.

Dicho reparto se hace en base a un listado que acuerda la Junta de la Carrera Diplomática en función del escalafón y las preferencias expresadas por los diplomáticos y que traslada a la ministra, que suele respetarlo. Según ha podido saber Europa Press, de ese listado solo se habrían caído tres nombres.

Pero el malestar entre los diplomáticos ha venido motivado porque entre quienes figuraban en dicho bombo también había algunos diplomáticos que optan a ocupar una embajada y que figuran en un listado en manos de la ministra.

RETRASO EN EL REPARTO DE EMBAJADAS

Según explican las fuentes consultadas, el reparto de embajadas debería haberse conocido hace semanas y en todo caso antes de anunciarse el bombo , puesto que ahora algunos diplomáticos se encuentran en la tesitura de que han recibido un destino al que luego podrían renunciar si finalmente González Laya les nombra embajadores.

Una de las cuestiones que más sorpresa genera entre los diplomáticos, y también entre la oposición –que ha presentado incluso preguntas parlamentarias al respecto– es que no haya reemplazo inmediato para los embajadores que se jubilan.

El embajador en India, José Ramón Barañano Fernández, fue cesado el pasado 27 de octubre tras cumplir los 70 años, la edad prevista de jubilación entre los funcionarios, sin que por ahora González Laya haya designado a su reemplazo.

El siguiente fue el embajador en Londres, Carlos Bastarreche, el pasado 2 de febrero. En su caso, había alcanzado la edad de jubilación en noviembre pero siguió temporalmente en el cargo a la espera de que se concluyera el acuerdo entre la UE y Reino Unido para la relación futura, que se cerró el 24 de diciembre, y el posterior marco de entendimiento entre España y Reino Unido sobre Gibraltar que tiene que servir de base para un acuerdo entre la UE y Londres sobre el Peñón, sellado el 31 de diciembre.

El último en sumarse a esta lista ha sido el titular en la Embajada de Bosnia, José María Valdemoro Giménez, el pasado 24 de marzo, y a lo largo del mes de mayo se le unirán el actual embajador en Irán, Luis Felipe Fernández de la Peña, y el de Rusia, Fernando Valderrama, ya que ambos cumplen 70 años.

En todos los casos, cuando no hay un embajador designado, queda al frente el número dos de la embajada, el encargado de negocios, pero en un mundo como el diplomático en el que el protocolo y las normas son claves, el nivel de representación ante el Gobierno del país en cuestión no viene a ser exactamente igual, explican los diplomáticos.

Aunque las fuentes consultadas coinciden en señalar que compete a la ministra hacer los nombramientos y no hay un calendario estipulado para ello, admiten que la situación está generando malestar e incomprensión entre los miembros de la Carrera Diplomática, dada la excepcionalidad de la situación.

TODO DENTRO DE PLAZO

Sin embargo, González Laya ha asegurado este jueves que los nombramientos están «perfectamente dentro de los plazos», con la excepción de las embajadas de India y Reino Unido, ha reconocido, si bien ha hecho hincapié en que en ambos casos hay «dos personas que están haciendo las funciones de embajador».

Igualmente ha negado que esté habiendo dificultades con la obtención del plácet para los nuevos embajadores, asegurando que lo que se está produciendo es «una discusión para ver quién está en mejor posición de ocupar qué puesto».

Así pues, ha esgrimido, se trata de «una cuestión puramente interna» y una vez que se tome la decisión se comunicará a los interesados y tras recibir el plácet del país de destino «se comunicará a todos». Está todo «dentro de la normalidad de funcionamiento del Ministerio, ni más ni menos», ha recalcado.

FUTURO REGLAMENTO DE LA CARRERA DIPLOMÁTICA

Otro factor a tener en cuenta, indica una de las fuentes consultadas, es que aún no está en vigor el Reglamento de la Carrera Diplomática. En 2017, el Tribunal Supremo declaró nulo el real decreto por el que se aprobaba dicho reglamento, por lo que actualmente el Gobierno tiene abierto el proceso para la aprobación de un nuevo texto.

En el borrador del mismo, se estipula un calendario concreto para la publicación de las plazas vacantes y su adjudicación que en el futuro evitaría situaciones como la que se está produciendo este año.

Por regla general, los relevos en los distintos destinos dentro del bombo se hacen a principios de agosto, salvo excepciones. Así, por ejemplo, según han contado las fuentes consultadas, en esta ocasión dos de los puestos a ocupar serán los de dos diplomáticos que se jubilan –los cónsules en Puerto Rico y Bogotá– por lo que sus sucesores ya han sido notificados de que su incorporación se hará cuando dicha jubilación se haga efectiva en el otoño.

En este sentido, las fuentes llaman la atención sobre el hecho de que en ambos casos sí haya habido previsión para tener en cuenta que hay diplomáticos que se jubilan y no se esté haciendo lo mismo con los embajadores.