Las obras en el desagüe de fondo del embalse del Ebro finalizarán en febrero
El presidente de la CHE ha visitado este jueves las obras, que suponen una inversión de 3 millones de euros
Las obras que se están ejecutando en el desagüe de fondo del embalse del Ebro finalizarán en febrero de 2026 y supondrán una inversión de 3 millones de euros.
Así se ha dado a conocer este jueves con motivo de la visita que ha realizado a estas obras el presidente de la Confederación Hidrográfica del Ebro, Carlos Arrazola, acompañado por el ingeniero director de los trabajos, Julián Brihuega.
Arrazola ha destacado la importancia de este embalse, el tercero con mayor capacidad de la cuenca del Ebro y que en su mayoría se ubica en Cantabria, aunque también se extiende por territorio burgalés.
Se trata, según ha dicho, de un recurso «emblemático y símbolo del principio de unidad de cuenca» y también de «estratégico» al ser «hiperanual» (cuando está lleno, es capaz de satisfacer los usos más allá de un solo año hidrológico) y capaz de suministrar agua en épocas de escasez, como durante la sequía de 2023.
LAS OBRAS
El director de la obra, Julián Brihuega, ha explicado los pormenores de la obra.
El desagüe de fondo que se está recuperando en la actualidad es uno de los dos de los que dispone el embalse. Se encuentra ubicado en el propio cuerpo de la presa.
Entre las actuaciones que se han realizado, figura el revestimiento de metal de los conductos del desagüe de fondo que están en la presa, que son de hormigón, para protegerlos de la erosión que provoca el agua.
Además, en el paramento de aguas arriba se han desmontado dos compuertas que estaban «en mal estado». Para hacer este trabajo un grupo de buzos hubo de sumergirse para colocar una cobertura para trabajar con menos riesgo. Se dragaron unos 3,5 metros de sedimentos para acceder a la zona de compuertas y poder retirarlas, repararlas y colocarlas de nuevo, ha destacado la CHE.
EMBALSE DEL EBRO
El embalse del Ebro es obra del ingeniero y primer director técnico de la Confederación Hidrográfica del Ebro, Manuel Lorenzo Pardo.
Sus obras se iniciaron en 1921 y se terminaron en 1945 y tiene una capacidad de embalse de 540 hectómetros cúbicos.



