Las infecciones quirúrgicas se podrían prevenir más del 50% aplicando correctamente un programa, según una experta
La aplicación de un programa de medidas podría prevenir más del 50 por ciento de las infecciones de sitio quirúrgico, según ha asegurado la presidenta de la Asociación Española de Enfermería Quirúrgica, Amparo Rubio.
Durante el XXII Congreso Nacional y XI Internacional, que se celebra del 20 al 22 de septiembre en Palma de Mallorca, la presidenta de la asociación ha asegurado que aplicando correctamente el Programa de Reducción de la Infección Quirúrgica del Observatorio de Infección Quirúrgica se evitarían infecciones.
En el congreso se ha recordado que la infección de sitio quirúrgico es la más prevalente relacionada con la asistencia sanitaria, en Europa con un 19,6 por ciento y en España, con un 21,6 por ciento.
En cuanto al programa, en el quirófano no se recomienda utilizar sistemas de flujo laminar. Además, la temperatura ha de oscilar entre 21-23 grados y la puerta del quirófano debe permanecer siempre cerrada, así como limitar el número de personas dentro.
«Capítulo especial merece el tema del ruido respecto al uso adecuado de los teléfonos móviles y la existencia de evidencia de la relación entre aumento de ruido y aumento de errores», ha añadido Rubio.
También se recomienda, siempre que sea posible, el uso de técnicas endoscópicas sobre la cirugía abierta por su acceso menos invasivo.
Asimismo, Rubio ha insistido en que «se recomiendan con nivel fuerte, la ducha previa, profilaxis antibiótica en los 60 minutos antes de la intervención, normotermia y, respecto al rasurado, no retirar de forma rutinaria, y, si es necesario, con maquinilla eléctrica de cabezal desechable en tiempo lo más próximo a la intervención.
Respecto a las medidas sobre el equipo operatorio, se aconseja una vestimenta exclusiva para el área quirúrgica, con mascarilla tapando boca y nariz. Por su parte, no se recomienda el uso joyas, así como uñas artificiales y laca de uñas, aunque esta es una recomendación débil.
En este sentido, se considera recomendación fuerte el cambio de guantes en distintas fases de la intervención y el cambio de material quirúrgico antes del cierre. Sin embargo, aunque es práctica bastante habitual, es de recomendación débil la irrigación de las cavidades quirúrgicas y no se recomienda el lavado con soluciones antisépticas ni antibióticas.
Del mismo modo, el presidente del Observatorio de Infección Quirúrgica, José María Badía, ha resaltado durante su intervención que «la reducción de la infección postoperatoria es una labor de equipo que debe abarcar todo el periodo perioperatorio. Los equipos quirúrgicos, con su núcleo constituido por enfermería quirúrgica, anestesistas y cirujanos especialistas, deberían ser empoderados para que sean los protagonistas del cambio. Dichos equipos quirúrgicos deben trabajar de forma coordinada con el resto de grupos hospitalarios relacionados con la infección quirúrgica».