Las fuerzas de Haftar aseguran haber atacado un barco con armas turcas en el puerto de Trípoli
Horas después del inicio de las conversaciones entre las delegaciones militares libias
Las fuerzas del mariscal de campo Jalifa Haftar, leal a las autoridades asentadas en el este de Libia, han asegurado este martes haber atacado en el puerto de Trípoli un barco que transportaba armas y municiones enviadas por Turquía al gobierno de unidad.
«El barco turco cargado con armas y municiones llegado esta mañana al puerto de Trípoli ha sido destruido», ha indicado el llamado Ejército Nacional Libio (LNA) en un comunicado recogido por la cadena de televisión saudí Al Arabiya.
El diario The Libya Observer ha confirmado el impacto de varios proyectiles en el puerto y ha publicado fotografías y vídeos en los que se ve una gran columna de humo negro en el lugar.
El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, anunció en enero el envío de tropas al país en apoyo al gobierno de unidad, con sede en Trípoli y encabezado por el primer ministro, Fayez Serraj.
El ataque ha tenido lugar horas después del inicio de la segunda ronda de conversaciones entre las delegaciones militares de las partes enfrentadas, en un proceso que está teniendo lugar en la ciudad suiza de Ginebra.
Durante la apertura de las conversaciones, el jefe de la Misión de Apoyo de Naciones Unidas en Libia (UNSMIL), Ghasán Salamé, ha confirmado el ataque contra el puerto de Trípoli, sin dar más detalles al respecto.
«La situación sobre el terreno sigue siendo una en la que la tregua es muy frágil y es violada a menudo. Tienen lugar nuevos ataques, incluso hoy en el puerto de Trípoli. Hay incidentes por todas partes», ha señalado.
Sin embargo, ha destacado que «ninguna de las partes ha renegado hasta ahora al concepto de la tregua» y que «el proceso político está intentando buscar su camino para seguir adelante».
Salamé se ha mostrado «contento» de estar en Ginebra y ha resaltado que «las dos delegaciones llegaron ayer (por el lunes) y los encuentros han arrancado a las 10.00 horas (hora local)».
«Esperamos ser capaces en esta ronda de encontrar algún tipo de consenso sobre lo que podría ser un alto el fuego duradero en Libia», ha remachado el representante especial de la ONU para Libia.
El grupo de contacto, cuya creación fue pactada en el foro celebrado en Berlín el 19 de enero, tiene como principal misión verificar el cumplimiento de la tregua a la que teóricamente se comprometieron las partes.
El propio Salamé incidió el 7 de enero en que este grupo «es una de las tres vías» que se están intentando organizar para impulsar un proceso de paz, junto con la económica y la política, que se abrirá el 26 de febrero en Ginebra.
RESPALDO DEL CONSEJO DE SEGURIDAD
El Consejo de Seguridad de la ONU aprobó la semana pasada una resolución en apoyo a las conclusiones de la conferencia Berlín, que incluyen un compromiso con el embargo de armas al país y el apoyo a los esfuerzos del jefe de la UNSMIL para impulsar un diálogo nacional para poner fin al conflicto.
El texto, redactado por Reino Unido y aprobado con catorce votos a favor de un total de 15 porque Rusia se abstuvo, pide a las partes que se comprometan con un «alto el fuego permanente en Libia, a la primera oportunidad, sin condiciones previas».
Por otra parte, la resolución 2510 también expresa su «grave preocupación» por la participación de «grupos terroristas» en el conflicto, además de por la intervención de «mercenarios» y muestra su alarma por el deterioro de la situación humanitaria en el país.
A principios de abril de 2019 las fuerzas de las autoridades asentadas en el este de Libia, bajo el mando del mariscal de campo Jalifa Haftar, pusieron en marcha una ofensiva para hacerse con Trípoli, donde tiene su sede el gobierno de unidad, que está liderado por Fayez Serraj y que cuenta con el respaldo de la ONU.
Además, Haftar anunció a mediados de diciembre el inicio de la «batalla final» y la «hora cero» por Trípoli y ordenó a sus fuerzas avanzar hacia la ciudad. En este contexto, sus fuerzas tomaron por sorpresa a principios de enero la ciudad de Sirte, en un duro golpe al gobierno de unidad.