Las consultas del centro de salud de Reinosa reabrirán de forma progresiva a principios de año
Buruaga reitera que no cesará a Pascual y censura la «manipulación y desfachatez» de PRC y PSOE
Las consultas del centro de salud de Reinosa reabrirán de forma progresiva «a primeros de año», después de que la actividad asistencial se trasladara al Hospital Tres Mares el pasado mes de septiembre debido al desprendimiento de una parte del techo.
La reapertura ha sido anunciada este lunes por la presidenta cántabra, María José Sáenz de Buruaga (PP), en el Pleno del Parlamento, durante su respuesta a sendas preguntas de PRC y PSOE sobre el cese del consejero de Salud, César Pascual, y al que según ha reiterado no va a destituir del cargo.
En su intervención, en la que ha negado que haya «caos» sanitario, pero sí «manipulación y desfachatez» por parte de regionalistas y socialistas, la jefa del Ejecutivo ha indicado que el derrumbe parcial del techo -de la consulta 14 mientras una facultativa trabajaba, aunque pudo abandonar el lugar antes- estuvo motivado por «falta de mantenimiento» en anteriores legislaturas.
Y ha defendido la actuación de la Consejería de Salud, que «reaccionó rápidamente y adelantó los trabajos de rehabilitación que ya estaban previstos para ejecutar anticipadamente una actuación de emergencia que va a permitir retomar paulatinamente la normalidad del centro con la entrada del nuevo año», ha avanzado Buruaga.
Según ha expuesto en la Cámara, «la mayoría de los problemas» que padece en la actualidad la sanidad cántabra tienen su origen en la «inacción» del Gobierno PRC-PSOE, incluidas -ha dicho- las «deficiencias» de la sanidad de Campoo, ya que en la pasada legislatura los anteriores gestores «suprimieron el servicio de cirugía mayor ambulatoria, en 2020, y las endoscopias, en 2028».
Por estos y otros motivos, ha vuelto a asegurar que no va a cesar a su consejero de Salud, destitución por la que han preguntado de nuevo PRC y PSOE debido a la gestión del titular de la cartera y, también, a las recientes y polémicas declaraciones de la entonces directora del Hospital Valdecilla sobre las listas de espera y que provocaron la dimisión de María Dolores Acón.
NO HAY CAOS, SINO UN ENORME EMPEÑO POR TRASLADAR SENSACIÓN DE CAOS
«Ni voy a cesar al consejero ni la sanidad se hunde, ni hay agendas ocultas ni manipulación en las listas de espera. La única manipulación que hay aquí es la suya», ha respondido la jefa del Ejecutivo al portavoz parlamentario de los socialistas, Pablo Zuloaga, después de contestar a la misma cuestión formulada por su homólogo regionalista, Pedro Hernando, al que ha recriminado la «infinita desfachatez» de su partido y al que ha aclarado que «no hay caos» en el ámbito sanitario, sino «un enorme empeño por trasladar sensación de caos», además de «ruido, demagogia e irresponsabilidad».
Ambos diputados han aprovechado las preguntas a la presidenta en el primer pleno del mes para interesarse otra vez por la destitución de Pascual, algo que no prevé Buruaga, como ya avisó en septiembre, cuando sentenció que «ni muerta» cesaría a su responsable de Salud. Zuloaga considera en cambio que «sobran los motivos» para relevar a este consejero debido al «caos» sanitario en la región. «Su proyecto sanitario es fallido», ha resumido, en tanto que Hernando ha indicado que la «presidenta sanitaria» -como se autodenominó la líder del PP cuando cogió las riendas del Gobierno- es «responsable directa de todo esto».
Pero Buruaga ha defendido la gestión de Pascual reivindicando la contratación de 17 médicos en Laredo y otros 37 para cubrir las sustituciones en Atención Primaria, siete de ellos para los SUAP. También ha puesto en valor el acuerdo alcanzado, precisamente, con los SUAP para «acabar con años de desatención y conflicto», así como la solución a la «chapuza de la protonterapia», el pacto firmado con los médicos para mejorar sus condiciones laborales y el plan para reducir las listas de espera, que, según ha avanzado, va a permitir terminar el año con mejores datos que al cierre de 2023.
«No voy a cesar al consejero, porque tiene mi confianza y porque está gestionando la sanidad con criterio, valentía y honestidad en una situación de enorme complejidad», ha argumentado la presidenta, antes de valorar que el presupuesto para 2025 contempla la mayor dotación de la historia para la sanidad pública y un total de 136 millones de euros más que lo destinado por el anterior Ejecutivo.
A su juicio, la sanidad pública cántabra es «de Primera División» y ha asegurado que la asistencia a los pacientes se está prestando «con absoluta normalidad», eso sí, tras un verano «difícil» por la falta de médicos para sustituciones y admitiendo la existencia de «problemas» en una organización de la dimensión del Servicio Cántabro de Salud (SCS), aunque en su opinión «la mayoría» de ellos derivan de la «inacción del pasado», cuando PRC y PSOE gobernaban la región y la sanidad dependía de este último partido.
MISERIA Y COBARDÍA POLÍTICA
«Yo no vivo en la inopia ni me desentiendo de la gestión de la sanidad, como ha venido ocurriendo en etapas y legislaturas anteriores», ha afeado la popular a sus antecesores en Peña Herbosa, negando la «descripción apocalíptica» que hacen ahora y apelando a la «honestidad» del PRC, para que deje de actuar como si no hubiera gobernando nunca: «Con sus críticas exageradas están poniendo en el espejo todos sus debes» de años en los que «han pasado olímpicamente» de la sanidad, les ha advertido.
Y a Zuloaga le ha reprochado su «estrategia» de «miseria y cobardía política» y «campaña de hostigamiento» a Pascual, así como el hecho de que «todos los días miente y distorsiona la realidad para tratar de trasladar a los cántabros un caos que solo existe en su cabeza».
También ha reprochado al secretario general del PSC-PSOE que «se atreve hoy a hablarnos de sanidad business» cuando los socialistas son «los de las mordidas» y «con la que está cayendo con Aldama, con Koldo, con Delcy, con Begoña, con los ministros y Santos Cerdán», o por «mantener a un imputado al frente de la Fiscalía General del Estado» o «tratar de utilizar las instituciones de todos para destruir a un rival como la presidenta de la Comunidad de Madrid».
«Yo no soy la Inquisición, ni mi casa ni mi Gobierno es una secta. Eso ya lo hemos visto este fin de semana en Sevilla», en el Congreso Federal del PSOE, ha apuntado Buruaga a Zuloaga, al que ha avisado que si sigue «encendiendo» Cantabria «igual a lo mejor se quema».
Por todo lo anterior y por último, la presidenta ha pedido a regionalistas y socialistas que «dejen trabajar». «El consejero de Salud y yo sabemos perfectamente a qué hemos venido aquí: Venimos a hacer lo que haya que hacer, aunque nos desgastemos. Porque lo importante es que los que no se desgasten sean los ciudadanos», ha concluido.