La Xunta comunica a los cerca de 300 contagiados por Covid que no pueden ir a votar y pide «responsabilidad»
SANTIAGO DE COMPOSTELA, 11
El vicepresidente de la Xunta, Alfonso Rueda, ha informado este sábado de que la Consellería de Sanidade ha comunicado a los afectados quién no puede ir a votar en las elecciones al Parlamento gallego de este domingo por haber dado positivo por COVID-19 o estar a la espera del resultado de las pruebas. Ha apelado a su «responsabilidad», puesto que no se establecerá un dispositivo de vigilancia para controlar que no rompan el aislamiento.
En declaraciones a los medios tras visitar el centro de prensa para la jornada electoral, Rueda ha señalado que «comparadas con el resto del censo, no son un número significativo» y se ha referido a que «no llega a 300».
De acuerdo con los datos aportados este sábado por la Consellería de Sanidade, hay 259 casos activos con COVID-19 en Galicia –positivos que no podrían ir a las urnas, salvo que reciban el alta antes–, pero el dato concreto de cuánta gente no podrá ejercer su derecho al voto no está calculado porque los que están pendientes de prueba varían constantemente, han explicado fuentes de la Xunta.
El vicepresidente ha manifestado que «hay circunstancias que determinan que no se puede ir a votar» y que para este caso «así lo ratificó la Junta Electoral. «Creo que la responsabilidad de estas personas hará que entiendan que en la jornada de mañana, si no votaron por correo, no pueden ir a votar», ha agregado.
«A esas personas no se les va a poner vigilancia, pero seguro que entienden que, por su propio interés y por el del todo el mundo, no pueden acudir a los colegios electorales», ha insistido.
Quienes estén en cuarentena sin resultado positivo y sin estar pendientes de prueba, sin embargo, sí pueden salir, «tomando todas las precauciones», para depositar su voto, ha recordado el vicepresidente.
En cualquier caso, Rueda ha afirmado que quienes no pueden acudir a los colegios electorales «lo saben perfectamente» porque las autoridades sanitarias ya se lo han comunicado.
El conselleiro de Sanidade, Jesús Vázquez Almuiña, se refirió en una rueda de prensa este viernes a los casos de positivos y puntualizó que «la única prohibición por parte sanitaria es aquel que tiene una enfermedad infectocontagiosa, que afecta a la salud colectiva de la sociedad».
«Decimos que no pueden salir de casa por un tema de salud pública, que afecta a los demás ciudadanos», aclaró y señaló que, si no se cumple el confinamiento en este tipo de circunstancias hay que «dar un informe a la autoridad judicial, que es la que marca en ese momento el confinamiento».
EUSKADI AVISA DE QUE SE PUEDE COMETER DELITO
Euskadi afronta también este domingo una jornada electoral y ha avisado a los positivos por COVID-19 de que no pueden ir a votar y, si lo hacen, cometerán un delito contra la salud pública, que podrá ser penalizado, según el Gobierno vasco, que ha indicado que unas 160 personas se encuentran en esta situación.
Además, ha recordado, tal como ha establecido la Junta Electoral, «la imposibilidad de posponer la materialización del voto» para las personas enfermas o que, por cuestiones «sobrevenidas», no pueden ejercer mañana su derecho a sufragio.
En una comparecencia pública de las consejeras de Salud y de Seguridad, Nekane Murga y Estefanía Beltrán de Heredia, respectivamente, han querido subrayar que los ciudadanos afectados por el coronavirus, que no pueden moverse de su domicilio por esta enfermedad contagiosa, y que fueran a ejercer su derecho a voto, «estarían poniendo en riesgo la salud» de la ciudadanía y estarían cometiendo un delito. «Aquellas personas que se detecte que incumplen esa medida, son susceptibles de recibir el expediente correspondiente», ha apuntado Beltrán de Heredia.
Además, Murga ha precisado que la confidencialidad les impide dar datos de estas personas a los miembros de la mesas electorales para que sepan que están enfermas, pero ha explicado que se trasladará una notificación «claramente» a los infectados «para que conozcan de antemano la gravedad que supone para la salud publica saltarse» esta medida. «Están llamadas a la responsabilidad», ha asegurado.